El agente de la Dirección de Seguridad Pública Municipal de Torreón, Saúl Ramírez, salvó la vida de dos personas durante la madrugada del sábado al introducirse a una vivienda en llamas, en donde los moradores estaban atrapados.
El agente de la Dirección de Seguridad Pública Municipal de Torreón, Saúl Ramírez, salvó la vida de dos personas durante la madrugada del sábado al introducirse a una vivienda en llamas, en donde los moradores estaban atrapados.
La emergencia se registró alrededor de las cuatro horas de la madrugada del sábado en una vivienda ubicada sobre la calle Azucena y la avenida Gladiolas, del ejido El Águila, de Torreón.
Fueron vecinos del poblado los que se comunicaron a la línea de emergencias, 911, para reportar el incendio en la vivienda e informar que dentro había dos personas, madre e hijo, los cuales no podían salir porque el fuego estaba consumiendo todo el exterior, ya que la familia se dedica a la venta de leña y materiales de reciclaje.
Debido a la cercanía que tenían con el lugar de los hechos, el agente Saúl Ramírez y su compañero arribaron hasta el domicilio a bordo de la patrulla número 35269, siendo Saúl el que decidió ingresar a la vivienda para rescatar primeramente a Enrique Castañeda y después regresar para sacar a la madre de Enrique, Aristea Castañeda, de 79 años de edad, a la que cargó en hombros para llevarla al exterior de la casa, el oficial resultó con quemaduras en una mano, pero logró poner a salvo a los habitantes del domicilio incendiado.
Madre e hijo recibieron atención médica por parte de los paramédicos de la Cruz Roja, quienes no les apreciaron quemaduras o síntomas de intoxicación, además le brindaron atención al agente lesionado.
Por su parte, los elementos del cuerpo de bomberos y de la unidad de Protección Civil realizaron las maniobras necesarias para sofocar las llamas que se encontraban por toda la vivienda, ya que el fuego se extendió rápidamente por los materiales altamente inflamables que se encontraban apilados al exterior de la misma.
Hasta el momento, las autoridades ignoran cómo es que inició el fuego que acabó por consumir la madera que vende el hijo de Aristea para su sustento, así como el techo de vigas de la casa y las pacas de ropa que ofertaban en la fayuca.
Toda vez que las autoridades descartaron cualquier riesgo en la vivienda, las dos máquinas de ataque rápido y las dos cisternas que acudieron al auxilio se retiraron del lugar.
