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CLAUDIO MARTÍNEZ

Después de un complicado 2022, Rafael Pineda llegó fiel a su costumbre, desde el primer día de la pretemporada y hasta ahora es uno de los lanzadores que más ha lucido en los juegos de exhibición; cuando el lanzador derecho vivía sus primeros días en el campo de entrenamiento, manifestó en entrevista, que los problemas de salud de su señora madre le habían afectado; lo anterior demuestra una vez más que todo jugador de beisbol, así sea la máxima figura de ligas mayores, antes que nada es un ser humano y como tal está propenso a lesionarse, a enfermarse, a tener malas rachas, a distraerse por la enfermedad de algún ser querido o a sufrir bajas de juego por muchas circunstancias más; el público aunque paga un boleto para disfrutar del espectáculo, tiene que ser consciente de esta situación.

Si bien es cierto que Rafael Pineda tuvo un difícil 2022, también lo es que en el 2021 estuvo muchas semanas como el pitcher número uno de la Liga Mexicana de Beisbol (LMB), y fue pilar en la temporada regular del equipo, aunque en los juegos de playoff no lució igual de efectivo. Pineda es antes que nada un gran ser humano, respetuoso de todos sus compañeros, del cuerpo técnico, de sus directivos y obviamente de la afición, la cual en La Laguna le ha demostrado un gran apoyo. En pocas palabras Rafael Pineda es un profesional de los spikes a la visera, siempre dispuesto a colaborar con el equipo en el rol que sea necesario y con todo su esfuerzo sobre la loma de pitcheo en busca de colaborar con la causa; un jugador, además de su calidad como deportista, tiene que ser un gran ser humano y así es Rafael Pineda.

Después de los juegos de exhibición que ha sostenido Unión Laguna en este 2023, seguramente Jesús Manso y los encargados del pitcheo ya contemplan a Pineda entre los posibles inicialistas, luego de que no era considerado, aunque el popular Rafa también suele entregar buenas cuentas como relevo. Hoy se puede hablar de un casi seguro inicialista mexicano en Pineda, junto con Aldo Montes que en Tomateros de Culiacán fue utilizado como abridor en 2022-23, y con Luis Gámez, sin su mejor actuación en 2022, es un lanzador mexicano de indudable calidad. Hoy hablar de tres abridores nacionales confiables es una gran ventaja, porque en el campamento hay varios extranjeros que buscarían dos lugares en la rotación; Nicolino, Webb, Van Meter y Quiala, si alcanza a estar sano.

Hay extranjeros que en los juegos de exhibición no han enseñado tamaños suficientes para quedarse en el roster inicial, y en Algodoneros esa debe ser un aspecto que exige la máxima atención de cuerpo técnico y directiva, porque el objetivo inicial ya no es alcanzar el playoff, hoy se tiene la firme intención de llegar más lejos que simplemente a esa primera serie de postemporada. Justin Nicolino de pronto cae en baches de descontrol en donde es presa fácil de los bateadores contrarios, aunque de pronto luce como un lanzador controlado y dominante, como lo necesita un equipo que realmente aspire a cosas importantes. Nicolino sabe que hay otros brazos extranjeros en busca de un lugar, y está obligado a darlo todo en la pretemporada, para convencer al cuerpo técnico de que es un refuerzo confiable.

Lo que sí es muy recomendable es que todos los jugadores se presenten en el campo de entrenamiento el día que son requeridos, porque ese es un beneficio en lo individual y en el plano colectivo, porque el equipo podrá tener una mejor preparación y el aficionado tendrá mayores posibilidades de contar con un equipo ganador. Por todo lo expresado por la directiva, cuerpo técnico y jugadores, 2023 es un año clave en la vida de este nuevo Unión Laguna, y los objetivos están muy bien definidos, pero hay obstáculos que serán muy difíciles de librar, como los ocho equipos restantes de la Zona Norte, en donde ya no solo los favoritos de siempre tienen posibilidades, sino que Durango, Dos Laredos, Saltillo y Aguascalientes; la obligación es calificar y el compromiso debe ser hacerlo entre los cuatro primeros.

Grata sorpresa ha sido el veracruzano Edgar Bravo, que ya anteriormente se había manifestado como un buen bateador, pero en esta pretemporada ha enseñado avances interesantes que hacen pensar que tendrá un lugar en el roster de inicio de temporada. Es importante recordar que la buena base mexicana que se había construido recibió un duro golpe en los dos últimos años, para dar paso a extranjeros que nada aportaron a la organización, a pesar de los jugosos contratos con que se firmaron; hoy dar seguimiento a los Edgar Bravo, Luis Sesma, Omar Araujo, Luis Enrique Gastélum y otros jóvenes que se tienen, es un aspecto importante para tener esa base mexicana sólida que soporte varios años a un equipo exitoso; mientras eso no suceda, Unión Laguna deberá tener extranjeros más que sobresalientes.

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