Después de 380 días, Ricky ha regresado.
Al fin la pesadilla de Ricky Rubio acabó y el base español de Cleveland ya ha vuelto a la pista, su hábitat natural, donde mejor sabe hacer las cosas. La lesión que sufrió en el ligamento anterior de su rodilla izquierda, una rotura para ser más exactos, auguraba una recuperación larga y tediosa y después de 380 días, Ricky ha regresado.
En el momento del grave infortunio, el 28 de diciembre de 2021, el de los Cavs estaba jugando un gran baloncesto, con un promedio de 13 puntos, 4 rebotes y casi siete asistencias por partido. Con la lesión, el base de Masnou revivía fantasmas del pasado, ya que en su debut en la NBA (2011/12) sufrió una importante dolencia en esa misma pierna y en la campaña 2014/15 solo pudo participar en 22 partidos, tras un fuerte esguince de tobillo.
Su vuelta a la competición se produjo en el Moda Center de Portland, donde los suyos se hicieron con la victoria 113-119, en una segunda mitad, remontando 14 puntos de desventaja. Rubio firmó una notable actuación en poco más de diez minutos de juego, con 9 puntos (1 de 2 en tiros libres, 1 de 1 en tiros de dos y 2 de 4 en triples) y una asistencia. Para Cleveland el triunfo supuso el cinco en los últimos siete partidos, aunque la mayoría de las portadas fueron para Ricky. Junto con el español, el nombre propio de la noche fue Damian Lillard, autor de la friolera de 50 puntos, pero que no evitaron la derrota de los Blazers.
Si especial para Ricky Rubio fue el partido de su vuelta, igual o más emotivo resultó el segundo encuentro, que llevaba a Cleveland a jugar en Minnesota, donde Rubio dejó su huella y donde todavía es un ídolo para la parroquia local, que así lo demostró antes, durante y después del choque, un duelo por cierto que acabó con victoria de los Timberwolves 110-102. Ricky participó cerca de 13 minutos, en los que anotó tres puntos, cogió dos rebotes y dio dos asistencias. De nada sirvieron los 19 puntos de Evan Mobley y Jarrett Allen para los Cavs, que aguantaron bien el tipo, hasta el arreón final de Minnesota en los últimos minutos.
El tercer encuentro de Ricky Rubio desde su vuelta llegó este pasado lunes, en el triunfo de los suyos 113-103 en la visita de New Orleans. El español estuvo algo más sobre la pista, 16 minutos, en los que anotó dos puntos. Con la victoria, los Cavaliers son quintos en el Este, con 28 victorias y 17 derrotas. El líder sigue siendo Boston, con 33 victorias y 12 derrotas. Y es que para la mayoría de portales que ofrecen cobertura diaria sobre la NBA, los Celtics son los grandes favoritos para hacerse con el anillo. Ejemplo de ello lo tenemos en Sportytrader.es, portal referente de pronósticos deportivos que, en sus pronósticos NBA, donde augura que la franquicia de Massachusetts ganará esta edición de la NBA, algo en lo que coinciden las principales casas de apuestas, como Bet365, que coloca a Boston por delante de los Nets y Bucks.
