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Un hombre palestino hirió hoy a cinco israelíes en un ataque con disparos junto a un centro comercial en un asentamiento judío en Cisjordania ocupada, antes de ser abatido por un policía israelí fuera de servicio, informaron a EFE fuentes oficiales.
El servicio de emergencias médicas israelí, Maguén David Adom, detalló que sus médicos trataron a cinco israelíes heridos -incluyendo un hombre en estado grave y un menor en estado moderado- antes de trasladarlos a hospitales de la zona.
La oficina del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, dijo que el mandatario se trasladó de inmediato al centro de comando del Ejército junto al ministro de Defensa, Yoav Gallant, para recibir actualizaciones sobre el incidente.
El Ministerio de Sanidad de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) confirmó la muerte del atacante y lo identificó como Muhanad Mohamed Suleiman al Mazra, de 20 años.
Un portavoz de la Policía israelí, por su parte, explicó que "una investigación preliminar del incidente revela que hace poco tiempo un terrorista abrió fuego contra una concentración de personas" en el asentamiento de Maale Adumim, muy cercano a Jerusalén.
Además, precisó que "un agente de la Policía de Fronteras que estaba fuera de servicio y se dirigía a la peluquería escuchó disparos y gritos de civiles sobre la presencia de un terrorista". Tras localizar al atacante poco después, "se identificó como policía y le instó a detenerse, tras lo que el terrorista se dio la vuelta y abrió fuego contra el agente, que respondió con disparos y lo neutralizó".
Un portavoz de los servicios de emergencia israelíes señaló que cinco israelíes resultaron heridos, incluyendo a un hombre de 40 años en estado grave y cuatro en estado moderado, entre ellos un niño de 14 años.
Poco después del ataque, el movimiento islamista palestino Hamás, que gobierna en la Franja de Gaza, y el grupo Yihad Islámica Palestina celebraron el ataque mediante comunicados de prensa que lo describieron como "heroico".
Este incidente tiene lugar en un clima de elevada tensión en la zona, que vive su mayor espiral de violencia desde la Segunda Intifada (2000-2005).
En 2023 ya han muerto 169 palestinos en Cisjordania ocupada o territorio israelí en el marco del conflicto, la mayoría milicianos en enfrentamientos armados con tropas israelíes y atacantes, pero también civiles, incluidos 29 menores.
En paralelo, el área ha visto la proliferación de nuevos grupos armados palestinos, que realizan cada vez más ataques y han dejado 27 muertos del lado israelí, la mayoría colonos, cinco de ellos menores, y tres uniformados.
