Gran ambiente en día final de actividades

Un caluroso martes ofreció el marco perfecto para la jornada culminante en la edición 2023 de la Copa Internacional Santos - Peñoles, donde las emociones estuvieron a flor de piel con la disputa de los campeonatos en cada una de las categorías, llegó ese día que todos quieren vivir al máximo, el día en que se detiene la respiración con cada tiro y se recupera con cada atajada.El grito de gol sonó más fuerte que cualquier día anterior, pues ahora estaba en disputa, ni más, ni menos que el título, ese por el que los equipos de 22 estados del país se prepararon durante meses, con el objetivo de alzar ese trofeo tan codiciado. 

Desde temprana hora comenzaron las acciones en Territorio Santos Modelo y en el Club Nuevo San Isidro, con jóvenes varones y damas dando lo mejor de sí sobre el terreno de juego, ante la algarabía de sus familiares que madrugaron para estar presentes en el importante acontecimiento, bien valía la pena.

Mientras subía la temperatura en el termómetro, subía también el ánimo en las gradas, apenas rodó el balón, comenzaron a fluir las emociones y rápido se calentó la garganta para gritar a todo pulmón el nombre del equipo que daba su máximo esfuerzo en el campo. 

El primer drama se vivió en la gran final de la categoría femenil, en la que las Leonas del Británico se esforzaban por rugir ante unas Guerreras Galácticas que mostraron la fortaleza del trabajo en equipo, en un duelo que terminó dramático, sin anotaciones y para definirse en tiros penales, con el drama todavía mayor al llegar hasta la muerte súbita, en la que surgió la figura de la guardameta Galáctica para atajar un disparo y poner a su equipo en posición de coronarse.

Hincada sobre el césped, Luisa se desbordaba en emoción, hasta que le dijeron "sigues tú", sintió que un helado viento recorría su cuerpo, pero el apoyo de sus compañeras la levantó para ir a encontrarse con el balón en el punto de penalti, desde donde pateó con fuerza, a la izquierda, las redes se movieron y la gloria llegó, gol de campeonato, la gloria era Galáctica. Ese drama se prolongó a lo largo del día, con finales en cada categoría, con héroes y villanos, con gozo y llanto, con la magia del futbol apareciendo a cada minuto.

Así es la Copa Santos - Peñoles, un auténtico ballet, una montaña rusa de emociones y de goles, con el gozo por el triunfo, pero también con la convivencia como eje central, en una oportunidad única para compartir experiencias con jugadores de todo el país y de más allá de las fronteras, teniendo al futbol como detonante. 

Llegó así, el día del regreso a casa para los equipos foráneos, el momento de recapitular las experiencias vividas durante festivos días en la Comarca Lagunera, que desde ya, espera por la edición del próximo año para volver a encender las emociones y la amistad en torno al balón.