(ESPECIAL)
Dos policías turcos y un guardia de nacionalidad siria resultaron muertos y otros 11 sufrieron heridas mientras desactivaban un explosivo cerca de la ciudad de Tel Abiad, fronteriza con Turquía y bajo control de Ankara desde 2019, informaron hoy las autoridades de la provincia turca de Sanliurfa.
La nota atribuye el explosivo a la milicia kurda Unidades de Protección Popular (YPG), que domina las regiones vecinas del noreste de Siria y también controlaba Tel Abiad hasta la intervención militar turca, en alianza con combatientes sirios locales, en 2019.
Ankara considera terroristas a las milicias YPG y su brazo político, el partido kurdosirio PYD, por sus vínculos con la guerrilla kurda de Turquía, el proscrito Partido de Trabajadores de Kurdistán (PKK), y las suele describir con las siglas PKK-PYD.
Según la nota, policías de la ciudad turca de Akçakale, vecina de Tel Abiad, descubrieron durante una patrulla en la ciudad siria un explosivo "como los que utiliza la organización terrorista PKK-PYD para atentar" en Turquía.
Al intentar desactivar el artefacto, este estalló y mató a dos policías turcos y un guardia que el comunicado describe como "policía local", además de herir a otros 11 agentes, cuatro de ellos policías turcos y los demás, nacionales sirios.
Turquía acusa desde hace años al YPG de realizar atentados en territorio turco y le atribuye también la masacre de noviembre pasado en Estambul, que causó seis muertos, aunque este grupo ha rechazado toda implicación.