(SERGIO A. RODRÍGUEZ)
La Iglesia Católica celebró en Monclova una Misa Crismal, concelebrada por dos obispos, 30 sacerdotes y 35 diáconos en el tempo de Santiago Apóstol.
En este acto litúrgico, por primera vez celebrado en Monclova, se bendijeron los santos óleos para los diferentes rituales de la fe. También sirvió para celebrar un siglo de comunión de la Diócesis.
Monseñor Hilario García González y Monseñor fray Raúl Vera López, obispo y obispo emérito de la Diócesis de Saltillo encabezaron el ritual que por primera vez se llevó a cabo fuera de la Catedral de Saltillo.
La misa crismal es una celebración litúrgica que se realiza durante la Semana Santa en la Iglesia Católica. Es una misa especial que honra los sacramentos del bautismo y la confirmación. Se celebra en la catedral del obispado diocesano en Saltillo y es una de las más importantes del año.
De acuerdo a los cánones religiosos, la misa es celebrada por el obispo, los sacerdotes y los diáconos permanentes y transitorios de la diócesis, y utilizan óleo santo, un aceite que se bendice y se utiliza para ungir a los creyentes durante el bautismo y la confirmación.
Durante la misa crismal, los padres y los diáconos renuevan sus votos sacerdotales, y el obispo bendice los óleos sagrados, conforme al ritual católico. Son tres los santos óleos y cada uno es usado para un sacramento específico.
Uno se utiliza para ungir a los creyentes que se preparan para el bautismo. Otro es para los enfermos, se usa para ungir a los ofrecerles consuelo espiritual y el tercero, llamado crisma, se usa para ungir a los que son bautizados y confirmados, y también se usa en la consagración de obispos y sacerdotes, y en la dedicación de iglesias y altares.
La misa crismal es una celebración importante para la comunidad católica, y representa la renovación de los votos sacerdotales y el compromiso de la iglesia con el sacramento del bautismo y la confirmación.
Antes de la homilía, que tuvo una duración superior a una hora, los sacerdotes, diáconos y obispos tuvieron un retiro de varias horas en la iglesia La Ermita, para reflexionar.
