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El 17 de marzo pero de 1990, Julio César Chávez noqueó en el duodécimo y último round a su retador Meldrick Taylor en el Hotel Hilton de Las Vegas y el triunfo, lo llevó a retener la corona de peso Superligero del Consejo Mundial de Boxeo (WBC, por sus siglas en inglés).
Cuando faltaban unos cuantos segundos para que terminara el combate, el réferi Richard Steele detuvo las acciones, lo que provocó controversia entre algunos, pero la actitud del tercero sobre la superficie, estuvo plenamente justificada por las pésimas condiciones en que se encontraba Taylor, quien había caído y se notaba peligrosamente castigado, como pudo constatarse en el hospital en el que fue internado casi inmediatamente después de terminarse el compromiso en el cuadrilátero.
La revista “The Ring” de Nueva York consideró la pelea como la mejor del año.
