El Super Bowl LVI que enfrentará a los Bengals de Cincinnati y los Rams de Los Ángeles será el primero que se juegue sin la leyenda del deporte estadounidense, Tom Brady en acción, quien anunció su retiró el pasado 1 de febrero.
El mítico mariscal de campo de 44 años lo intentó esta temporada de nuevo con los Tampa Bay Buccaneers, pero no lo logró, el responsable de su caída fue Matthew Stafford y sus Rams de Los Ángeles, quienes sí estarán en el Super Bowl LVI para enfrentar a Joe Burrow y los Bengals de Cincinnati. Dos jugadores que intentarán hacer buenas las apuestas NFL y llevarlas hacia su terreno.
Brady y sus Buccaneers cayeron en su casa ante los Rams en un épico partido que terminó consagrándolos como firmes candidatos para el trofeo Vince Lombardi de este año.
El mariscal de campo Matthew Stafford plantó cara ante Brady sus siete anillos de campeón, seis con los Patriots y el último, y uno de los más especiales, con los Buccaneers.
En el choque ante los Rams, Brady estuvo a punto de recrear su remontada inolvidable ante los Falcons en el Super Bowl LI, levantando un 27-3, incluyendo un -14 con la pelota en manos de los Rams a falta de cuatro minutos. Pero, aunque los Bucs llegaron a empatar el partido en 27 de manera increíble, un par de conexiones entre Matthew Stafford y Cooper Kupp, más un gol de campo ganador de Matt Gay, hicieron que Los Angeles termine imponiéndose por 30-27.
De alguna manera Stafford también vengó la derrota del 2018 en el Super Bowl ante los New England Patriots, por entonces comandado por el mismo Tom Brady.
Brady dejó para la historia cinco MVP en el Super Bowl y tres de la temporada regular. Incluyendo partidos de leyenda como el 28-3 remontado a los Falcons, sus duelos ante los Manning o el más reciente, al ganar con 43 a los Chiefs de Mahomes. Único e inimitable.
El mítico jugador se va con 84.520 yardas de pase y 624 touchdowns para el jugador que llegó a la NFL siendo el 199 del Draft. De la nada al todo, porque con un carácter único, un liderazgo intocable y una sed de ganar sin igual transformó la liga más vista de los Estados Unidos.
El partido grande de este año se jugará en el SoFi Stadium en Inglewood, California. Este recinto fue inaugurado en septiembre del 2020, tiene una capacidad para poco más de 70 mil espectadores y suele ser el hogar de los Rams y Chargers de Los Angeles en la NFL.
Los Angeles Rams acumulan cuatro viajes al partido por el título de la NFL. Se coronaron en el Super Bowl XXXIV con su jersey azul y perdieron las ediciones XIV, XXXVI y LIII, cuando vistieron de blanco.
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El mítico mariscal y sus Buccaneers cayeron en su casa ante los Rams. (CORTESÍA)
