A principios de agosto dejará de correr el agua por los canales y se agudizará el problema. (EL SIGLO DE TORREÓN)
El presidente de la Confederación Nacional de Productores Rurales (CNPR), Baudilio Rodríguez Abusaid, alertó sobre la urgencia de concretar una reunión con el gobernador de Coahuila, Miguel Ángel Riquelme Solís para que convoque a sus homólogos de Chihuahua, Durango, Sinaloa y Nayarit para establecer un plan emergente contra la sequía; dijo que la mayoría coincide en que se realice un bombardeo de nubes.
Añadió que, en el caso de la Comarca Lagunera, donde particularmente este año se acentúa la escasez del vital líquido, a partir del día tres de agosto la situación se agudizará, ya que con el cierre de las compuertas de la presas, por la culminación del ciclo de riego de los cultivos, los productores de ganado de traspatio no tendrán manera de subsistir. Ante la escasez, los anteriormente mencionados utilizaban agua de los canales para sus animales (en su mayoría cabras); incluso el agua rodada también la utilizan familias de una buena parte de los ejidos para labores domésticas.
El entrevistado mencionó que si no se actúa anticipadamente el año que entra se registrará una situación similar o peor a la que prevalece en el estado de Nuevo León, por tal motivo externó: "Le pedimos al gobernador de la manera más atenta que convoque a una reunión".
"Por eso le pedimos que actuemos y actuemos ya, antes de que se nos pasen los meses y que no se tengan las nubes suficientes para que se pueda hacer el bombardeo" agregó.
Dijo que otra situación que hay que considerar y que debe prender las alertas, es que este año derivado por las altas temperaturas, los cultivos de sorgo y maíz forrajero están infestados de plaga, lo que reducirá hasta en un 50 por ciento el rendimiento de las cosechas, por lo que insistió que si no se hace algo, el año que entra no habrá manera de cubrir la demanda de alimento para el ganado y traerlo de otras partes es "impensable" por los altos costos del combustible.
"Sabemos que hay muy poca agua en la presa y lo más probable es que el año que entra será un ciclo de riego reducido y eso es muy preocupante, porque también está la situación de las personas en los poblados y que la mayoría tiene años sin agua y por los menos en estos meses que además se elevan muchísimo las temperaturas pues tienen la posibilidad de agarrar el agua de los canales y el día que se cierra la presa va a ser un caos para todos" concluyó.
