
(ÉRICK SOTOMAYOR)
Hanan Jalil Hamdan es la menor de cuatro hijas de un matrimonio consolidado dentro de una cultura árabe. Sus papás, cuenta, le enseñaron a ella y a sus hermanas, entre muchas otras cosas, la importancia del trabajo y de la unión familiar.
Si bien al principio se dedicaba laboralmente al ramo gastronómico, desde hace nueve años invierte parte de su tiempo en el asesoramiento de bienes raíces en una sólida inmobiliaria de la región que le permite disfrutar de tiempo libre en actividades como el atletismo, el senderismo y momentos con sus hijos.
Aunque el haber sido madre por primera vez la tomó por sorpresa hace 24 años que nació su hijo Anuar, con el nacimiento de Mariam, cuatro años después, sintió lo mismo en ambas llegadas: “agradecer infinitamente el conocer y sentir el amor incondicional por otro ser humano”.
¿Cómo es que decides ser mamá?
A mi corta edad sin saber a lo que me enfrentaba, mi instinto maternal me marcó la decisión de serlo, la vida me sorprendió con esa gran bendición.
¿Crees que has conseguido un equilibrio entre tu rol profesional y tu rol de mamá?
Si. Decidí entrar en la profesión del mundo inmobiliario desde hace ya más de 9 años, ya que nos da la facilidad de administrar nuestro tiempo, por lo tanto administro mi rol de trabajo con mi rol de madre.
¿Cómo logras ese equilibrio?
Administrando mis tiempos entre mi trabajo, el deporte y mis hijos, siendo ellos mi prioridad.
¿Crees que hay un momento “exacto” para ser madre?
¡Creo que no! Dios o la vida lo determina.
¿Qué enseñanzas te ha dejado la maternidad?
Conocí la fortaleza que no sabía que existía en mí.
¿Qué has aprendido de tus hijos?
A vencer mis miedos y a no rendirme, ver la vida con otros ojos. De ellos conocí el amor incondicional.
¿Cuál es el mayor aprendizaje que le dejas tú a ellos?
Que la vida es una lucha constante, ser positivos, la importancia de ser amables, el respeto. Gracias a que vivimos en armonía llevan una excelente relación de hermanos.
¿Qué sentiste la primera vez que viste a tus hijos?
Una alegría inmensa, nunca antes sentida, también miedo de no poder ser suficiente para ellos.
¿Qué actividades disfrutas hacer con tus hijos?
Ahora mismo mis hijos son adultos, están en camino de lograr sus sueños, disfruto escuchar sus planes y compartir el día a día con ellos.
¿Y qué es lo más difícil de ser mamá?
Lo más difícil es que siempre me preocuparé por ellos, siempre estarán presente en cada momento de mi vida, aun sabiendo que la recompensa es infinita.
¿Cómo definirías el hecho de ser mamá?
En la maternidad comprometes tu vida para siempre, biológicamente, emocionalmente y espiritualmente y por otro lado la responsabilidad del sustento (lo material).
Dicen que se disfruta mucho a los hijos cuando se tienen siendo joven…
Sí, la verdad que a mí me encantó haber sido mamá joven. A lo mejor mis hermanas fueron mamás más grandes y tienen hijos chiquitos ahora, pero es diferente.
¿Cómo te gustaría celebrar el 10 de mayo?
Obviamente con mis hijos y con mi mamá, una reunión, comidita en casa, algo familiar.