Descartan por el momento que represente algún riesgo.
El río Aguanaval registra escurrimientos desde el pasado 28 de agosto; sin embargo, el pasado miércoles se elevó significativamente el caudal.
De acuerdo al monitoreo de la Dirección Técnica de Cuencas Centrales del Norte de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), en la madrugada la estación hidrométrica de La Flor de Jimulco registraba en la parte alta un volumen de 63 metros cúbicos (m3) por segundo, el cual iría disminuyendo paulatinamente, por lo que estimaban un volumen máximo, pasadas algunas horas, de 40 m3. El coordinador en la Comarca Lagunera de Protección Civil del estado, Humberto Rodríguez Bandres, dijo que se mantienen en constante monitoreo y que se reforzaron algunos bordos, entre otras medidas preventivas para evitar afectaciones a los habitantes de los ejidos de Matamoros y Viesca que se encuentran muy cerca del caudal.
Hasta el medio día de ayer, se descartó alguna contingencia mayor, pero el funcionario reiteró que se mantienen en alerta, debido a que se espera que las lluvias continúen en los siguientes días.
Recalcó que desde el pasado domingo empezó a correr el agua por ese río, el cual nace por la confluencia de varios arroyos de la vertiente norte de la sierra de Zacatecas, lo cual están aprovechando los agricultores. El funcionario reiteró que, por el momento, se descarta que represente algún riesgo.