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Pumas propone, busca, emociona, pero no gana. Los dirigidos por Andrés Lillini empataron (1-1) con el Celta de Vigo, en el partido amistoso que se realizó en Ciudad Universitaria.
El técnico Andrés Lillini arrancó su ofensiva con Juan Ignacio Dinenno, Eduardo Salvio y Diogo de Oliveira, quien fue el más ovacionado.
Y el delantero brasileño fue el encargado de hacer estallar el Olímpico Universitario al 22’, tras un tiro de esquina. Se elevó y remató para vencer al arquero Rubén Blanco.
El espectáculo en la cancha fue atractivo. Centros por ambas bandas, disparos de media y larga distancia, tanto de los locales como de los visitantes.
El equipo de Eduardo Coudet hizo constante daño al ganar la espalda de los defensas felinos, pero no podía definir.
Hasta que al 45’, la estrella de los españoles, Iago Aspas, fue el encargado de poner el 1-1 tras rematar un centro en el área en el que el portero Julio González quedó vencido.
La alfombra verde de Ciudad Universitaria parecía un tablero de ajedrez, porque mientras Pumas jugó con su jersey blanco, el Celta de Vigo improvisó su uniforme y jugó de negro.
En la parte complementaria se vio con claridad que el empapado césped hizo que el balón fuera más rápido, Pumas aprovechó este aspecto, sumado a que la altitud empezó a afectar a sus rivales, pero no pudo marcar diferencia.
