(CORTESÍA)
Después de años y de incontables horas de quimioterapias y en camas de hospital, por fin Luis Alberto Ian y Marcos, hicieron realidad uno de sus más grandes sueños: conocer el mar.
Desde el jueves, los pequeños y sus familiares, se encuentran en el puerto de Mazatlán, en donde pasarán el resto de este fin de semana, luego de que la asociación civil Encendamos una luz, hiciera posible este sueño.
Los pequeños quienes enfrentan una de las batallas mas grandes de sus cortas vidas contra el cáncer, han podido disfrutar desde su llegada de las delicias que ofrece este puerto.
Como se informó, este viaje es gracias a las aportaciones que empresas y familias deseinteresadas e incluso con el simple hecho de depositar sus tapitas de plástico en los contenedores en forma de corazón, es como se puede hacer realidad los sueños de estos pequeños guerreros.
Gracias a las fotografías que han enviado en sus diferentes recorridos, es notable la felicidad no solo de los pequeños sino de sus padres, quienes forman parte de este sueño.
En una de las imágenes se puede ver al padre de Luis Alberto, que desde su silla de ruedas pudo disfrutar de la belleza del mar y su brisa.
Al igual que Ian y Manual, cuya felicidad era evidente en su sonrisa.
Es así como el grupo Encendamos una Luz, ofrece a los pequeños que se enfrentan a una enfermedad como lo es el cáncer, para que se puedan olvidar por un momento de esos días difíciles y acumulen nuevos recursos y que éstos estén llenos de felicidad.
Será hasta el próximo mes de noviembre o diciembre, que un grupo de cuatro menores también puedan viajar hasta las playas de Mazatlán.
