Los padres de familia que han sido afectados, se plantaron en lo mas alto del puente peatonal para dar a conocer sus demandas, pero sobre todo justicia. (EL SIGLO DE TORREÓN)
Para visibilizar el problema que viven y pedir a las autoridades correspondientes que no olviden sus casos, madres y padres de familia cuyos hijos fueron sustraídos, así como de aquellos menores que sufrieron abuso o violación, colgaron mantas y carteles en el paso peatonal de la carretera Torreón - Matamoros, frente al Manto de la Virgen.
Se trata de madres y padres integrantes de la colectiva Justicieras por nuestras Infancias, en compañía de las Activistas Feministas de la Laguna.
Leyendas como "Justicia", "Francisco Ismael regrésame a mi niña", "Justicia para Mía, las niñas no deben ser mamás", se leían en los carteles y mantas que se colgaron, tanto fuera como dentro del puente para vista de todos los transeúntes y automovilistas.
"Ante la desesperación de las madres y padres que han tenido que pasar por el delito de sustracción de menores, que hoy conocemos como violencia vicaria, y que no han recibido justicia. Son madres que no han visto a sus hijos por tres, siete años, alguna que se los acaban de sustraer. (La intención es) Llamar la atención de las autoridades competentes y recordarles que estos casos están en curso, que por favor volteen, miren, y por favor protejan a la infancia", dijo Ariadne Lamont Martínez, directora de Incidencia y Acompañamiento a Víctimas de Violencia en el Instituto de Formación, Investigación y Consultoría de Género y Derechos Humanos A.C. (Incide Femme), quien acompañó a los padres de familia que han padecido de dichos delitos.
Lamont aseguró que si esa protección se diera, "seguramente van a terminar regresándole a su hijos a sus madres y poniendo en la cárcel a los violadores, porque son dos delitos los que están aquí denunciando: la sustracción de menores y la violación contra niñas y niños".
"Aquí hoy, frente al manto protector de la Virgen, queremos manifestar que la violencia sexual, la violencia vicaria y la violencia institucional, no deben ser parte de la experiencia de vida de ningún niño o niña, ni de sus madres y padres. Nuestro objetivo es, que se haga justicia, con todo lo que eso implica. Queremos sentencias justas y reparación del daño, que remonte los efectos de la violencia en la vida de nuestros pequeños", mencionaron en un comunicado los participantes.
En él, también exigieron un funcionariado digno de confianza, que actúe con sentido de urgencia, con el interés superior del menor como primer objetivo. "Queremos que ninguna criatura sea separada de su madre, como medida de castigo, por parte del papá".
Además de dependencias y funcionarios preparados. "Queremos una Pronnif, médicos legistas, Ministerios públicos capacitados para hacer su trabajo sin malos tratos hacia las victimas directas o indirectas, y que sepan integrar bien las carpetas. Queremos atención psicológica para nuestros hijos e hijas, de primer nivel".
Así como sanciones justas, "que se castigue con toda severidad las conductas delictivas, que tanto daño ocasionan a las infancias, que los agresores sexuales, o los que ejercen violencia vicaria reciban la sanción correspondiente. Queremos que en todos los casos las familias sean informadas que tienen derecho a recibir asesoría jurídica".
