Las autoridades ordenaron el levantamiento y traslado del cuerpo hacia el Semefo.
Una persona del sexo masculino fue localizada sin vida y con huellas de violencia al costado de una carretera.
Alrededor de las 15:00 horas del viernes, una persona que se dirigía hacia la carretera que conduce al ejido La Esperanza, se percató que a un costado del camino se encontraba el cuerpo de un hombre con varias heridas.
El hombre se encontraba boca arriba, y sobre la carretera también había restos de sangre, por lo que decidió dar aviso a las autoridades a través de una llamada al sistema estatal de emergencias 911.
Luego del reporte, las autoridades se movilizaron hasta el lugar para confirmar que se trataba de una defunción e iniciar con las indagatorias correspondientes.
Elementos de la Policía Estatal, al igual que agentes del Ministerio Público a cargo de la Fiscalía General del Estado.
Los agentes confirmaron que se trataba de un hombre, el cual ya no contaba con signos vitales; su cuerpo estaba entre los matorrales.
Hasta el momento, el hombre no ha sido identificado; su media filiación es de tez morena y de entre 40 y 50 años de edad, al momento de su hallazgo, el occiso vestía una camisa a cuadros, pantalón de mezclilla y cinturón plateado
De inmediato acorralaron el área e iniciaron con las labores para rescatar el cuerpo y trasladarlo.
Fue luego de más de una hora, que las autoridades procedieron a sacar el cuerpo de donde se encontraba y llevarlo hasta las instalaciones del Servicio Médico Forense (Semefo), para la necropsia de ley, que determinará las causas exactas de la muerte.
Agentes de investigación criminal, ya se encuentran indagando sobre lo ocurrido, aunque hasta el cierre de esta edición, no se proporcionó mayor información sobre el hecho.
SUMAN HOMICIDIOS EN EL MUNICIPIO
En menos de un mes, cinco hombres han sido asesinados de forma violenta en Matamoros.
El primer hecho violento ocurrió el 19 de septiembre en la colonia Carolinas, cuando dos hombres a bordo de una motocicleta arribaron a la vivienda y abrieron fuego contra cuatro personas, uno de ellos, un menor de 10 años de edad.
El segundo evento ocurrió el 23 de septiembre, cuando un hombre fue hallado al interior de su domicilio, el occiso también presentó signos de tortura.