Las acciones de búsqueda de Édgar son lentas ante el riesgo de colapso de dos silos que se encuentran en los costados, de los tres ya colapsados.
Un intenso día se vivió ayer martes al exterior de la empresa Alimentos Balanceados Simón Bolívar, S.A de C.V. en Torreón, luego de que vecinos, familiares y amigos de Édgar, desaparecido desde el derrumbe de los silos la mañana del lunes, se concentraran en el área para exigir agilidad en los trabajos o bien que les permitieran el acceso para ellos brindar apoyo.
Fue durante la misma mañana de ayer que la secretaria del Ayuntamiento, Natalia Fernández, llegó para informar que se integró una tercer grúa a las labores que se realizan en la zona dañada, por lo que ya suman cinco unidades maniobrando en el lugar.
Por su parte, Alfonso García González, de 51 años de edad, y Alejandro Cárdenas Rangel, de 38 años de edad, dos trabajadores que fueron rescatados el lunes, se encuentran estables, y las labores se enfocan en este momento en la búsqueda y rescate de Édgar Rodríguez de la Torre de 44 años de edad.
Al respecto, Jorge Luis Juárez Llanas, director de Protección Civil Municipal, dijo que las acciones son lentas ante el riesgo de colapso de dos silos que se encuentran en los costados de los tres ya colapsados y que así como se retiran algunas piezas de los puentes que unen cada estructura, hay otros fierros que se tienen que soldar para afianzar el área y evitar que estos dos silos comprometidos se desplomen.
SE BRINCAN LA REJA Y EMPIEZAN A EXCAVAR
Fue alrededor de la 13:30 horas de la tarde que Javier, el hijo mayor de Édgar, acompañado de otros familiares, brincaron la reja y comenzaron a excavar, ya que aseguraban "lo escucharon pedir ayuda", así mismo, otros familiares comenzaron a silbarle desde el perímetro, con el fin de obtener un silbido de respuesta y así ubicar el área donde posiblemente se encuentra.
Yolanda, esposa del trabajador atrapado, expresó "cuando llegué aquí, mi corazón estaba hecho garras, destrozado, queriendo encontrar a mi esposo con vida, pero al ver a mis hijos como están, me hice dura, porque tengo que pensar en ellos y mis suegros, que ya rebasan los 65 años".
Fue un breve instante que Javier, de 24 años, y sus familiares estuvieron en el área, ya que fueron retirados por las autoridades, luego de llegar a un acuerdo para revisar las maniobras que se realizan y constatar que las labores de búsqueda y rastreo no habían parado.
Transcurridas las horas, hasta el exterior de la empresa ubicada sobre la calle San Pedro del parque industrial Ferropuerto, comenzaron a llegar vecinos, amigos y más familiares de Édgar, en su mayoría originarios del poblado Ignacio Zaragoza del municipio de Viesca, de donde es originario, los cuales pretendían ingresar con palas y picos para ayudar, sin embargo al conocer la situación de riesgo que existe en la planta y el área del desplome, les fue negada la entrada.
Yolanda pidió el ingreso de la Guardia Nacional, por lo que el personal fue recibido y posteriormente se unieron a las acciones 32 elementos del Ejército, quienes coadyuvan con el rastreo, que vienen realizando los elementos de Protección Civil, municipal y estatal, así como del cuerpo de Bomberos y los binomios de la Policía Municipal que se extendieron a cuatro canes.
Además de los conocidos de Édgar, también acudieron civiles, de los cuales, uno de ellos identificado como Gilberto, donó un localizador para rastreo de personas, denominado Ixo y don Carmelo que desde hace 20 años, práctica la radiestesia, para la búsqueda de todo aquello que emita algún tipo de radiación.
Hasta el cierre de esta edición, las labores continúan de manera incansable al interior de la empresa, donde se trabaja con cuadrillas de 40 personas, que son relevadas por otras 40, es decir, los trabajos no han cesado en ningún momento, durante las más de 30 horas desde que sucedió el colapso.
