Al arrancar la campaña 2022 de la Liga Mexicana de Beisbol (LMB), los 18 equipos participantes, de acuerdo a sus respectivos rosters, registraron un total de 538 jugadores. De estos, 317 (59%) nacidos en suelo mexicano y 221 (41%) en el extranjero.
De acuerdo a lo establecido por la LMB, cada equipo puede tener hasta 7 peloteros extranjeros. Si este número se multiplica por 18 escuadras, el resultado da un total de 126. Cifra que comparada con 221 arroja una diferencia de 95. Estos 95 jugadores nacidos en el extranjero y no considerados con este carácter por la LMB son personas naturalizadas como mexicanas, o bien poseen doble nacionalidad, principalmente estadounidense y mexicana.
Por los países de los que son oriundos, los 221 beisbolistas que iniciaron la temporada 2022 de la LMB proceden de las siguientes diez naciones: De Estados Unidos 120 (54%), de República Dominicana 41 (19%), de Venezuela 36 (16%) y 11 de Cuba. Con números menores siguen: Colombia 4, Curazao 3, Puerto Rico también 3 y finalmente 1 de Brasil, otro de Panamá y 1 más de Sudáfrica. Total: 221.
El alto número de nacidos en Estados Unidos se explica por la también crecida cifra de peloteros de doble nacionalidad: norteamericana y mexicana. Alrededor de 85.
Después del número de peloteros nacidos en Estados Unidos siguen los oriundos de República Dominicana, si bien su cifra ha disminuido en los últimos años, lo mismo que los precedentes de Puerto Rico. En contraste se observan incrementos en los originarios de Venezuela y Cuba. Todos estos países beisboleros.
ANÁLISIS
Desde el último análisis publicado aquí hace una semana y hasta anteayer domingo, los Algodoneros de Unión Laguna sostuvieron siete juegos contra tres equipos diferentes: el último de la serie con los Tecolotes de los Dos Laredos y tres contra Generales de Durango, en gira en ambos casos, y la más reciente serie, en casa, contra Mariachis de Guadalajara, concluida el pasado domingo. Las últimas dos series ganadas.
Desde todos los ángulos el balance de estos siete juegos es positivo, al haberse ganado cuatro y perdido tres; al haber pasado del último lugar en la tabla de posiciones con un "average" de .286 al antepenúltimo lugar con .381, al acumular 8 triunfos por 13 derrotas.
El bateo colectivo mejoró al pasar de .297 a .318. Lo mismo por lo que hace a la efectividad en el pitcheo, al pasar de una semana a otra de 7.24 a 6.18 carreras limpias admitidas por cada nueve innings, ello a pesar del desastroso desempeño registrado por el cuerpo de relevistas, que echó a perder dos encuentros que debieron haberse ganado.
Al bateador de poder del equipo Nick Torres, por lo pronto fuera de circulación por el golpe que recibió en el juego del sábado, lleva recetados 20 ponches, más que ninguno otro de sus compañeros; y el equipo ha cometido 27 errores (el segundo con más pifias de toda la Liga, solo superado por los Bravos de León que llevan 30 "pecados"), es decir, en promedio más de uno por juego, algunos de los cuales costaron juegos que debieron haberse ganado.
Ojo con Campoy en esta materia, pues en la semana incurrió en 3 errores, la mitad de los 6 que llevan cometidos en lo que va de la temporada todos los jugadores de los Tecolotes de los Dos Laredos, por ejemplo.
A pesar de lo anterior, el equipo ha venido mejorando y se nota más asentado. Esperemos que así siga.
