(ÉRICK SOTOMAYOR)
Las piezas artísticas que crea Paola Lamberta Amarante nacen del autoconocimiento de su ser que se traduce y concluye en cuadros artísticos.
Originaria de Torreón, estudió Mercadotecnia y Diseño de Modas en Monterrey y durante su formación fue aprendiendo técnicas como dibujo técnico, ilustración, teoría del color y fundamentos del diseño que le han servido para sumar a lo que actualmente dedica su tiempo: hacer arte intuitivo.
¿Cómo llegas a hacer el arte que tú haces?
El arte que yo hago se llama Arte Intuitivo y es muy profundo. Para llegar a él primero tengo que recordar quién soy. Tener claridad de qué me gusta y qué no, estar consciente y observar qué me da felicidad, qué me inspira, qué me hace sentir viva y poner atención a lo que estoy sintiendo.
Después es fluir, soltar, quitar creencias limitantes. Jugar, no controlar, atreverme a equivocarme: dibujar formas, figuras, líneas, hacer marcas, crear texturas, usar colores diferentes…Tomar riesgos y confiar.
Por último observo…integro la parte cognitiva, los principios del diseño, diferencias, contraste, balance, etc.
¿Te encontraste más con este tipo de arte o por qué lo eliges hacer?
Me encanta el arte intuitivo porque me hace conectar conmigo, aventurarme, ser libre…me invita a confiar en mí.
¿Qué hacía que no te dedicaras a pintar?
Toda mi vida he pintado, aunque de manera intermitente, porque siempre anhelaba hacerlo más. Hace dos años, cuando empezó la pandemia, ya no encontré pretexto para no hacerlo.
¿El arte te ofrece algo que no encuentras en otra actividad?
Para mí pintar es vibrar alto, es paz, es felicidad, ¡Me hace sentir viva!
¿Cuáles son los colores que usas más en tus pinturas?
La verdad no tengo colores favoritos, creo que hay etapas en que tengo preferencia por algunos, pero amo todos los colores, los primarios y los que surgen de forma accidental al mezclar otros colores entre sí. Me fascina hacer combinaciones y descubrir colores nuevos.
¿Qué buscas con tu arte?
Con mi arte busco tocar almas, hacer sentir. ¿De qué sirve estar en este mundo si no sentimos?
¿Qué sentimiento te genera el dedicarte al arte?
Dedicarme a hacer arte es un honor para mí y me llena de orgullo. Creo que el mundo no podría sobrevivir sin arte, sería frío, monótono, aburrido.
¿Qué tan conectada está tu obra con tu vida personal?
Mi obra es un reflejo total de mi vida. Una parte va de conectar conmigo para ser auténtica, alegre, libre, conocerme y quererme. Y la otra parte es donde entra la estructura, lo práctico; ésta es la que me permite funcionar en este mundo dual.
¿Cuál es tu rutina para hacer tus piezas?
No tengo una rutina específica, la verdad depende de lo que esté viviendo. Puedo un día trabajar una hora y al día siguiente pasar ocho horas pintando.
¿La pandemia te ayudó a encontrarte con lo que te gusta?
La pandemia me ayudó a conectar con miles de artistas de todo el mundo. Me di cuenta que había miles como yo y que no soy tan diferente. Me hizo ver que ya no había excusas para no pintar, me hizo enfrentar mis miedos.
¿Estás satisfecha con lo que haces?
Estoy muy satisfecha con lo que hago, me siento muy bendecida porque encontré mi sentido de vida, mi pasión.
¿A qué otras actividades dedicas tu tiempo?
Convivir con mis hijos que amo con toda mi alma. Los domingos ir a casa de mis papás y abrazarlos, igual que a mis hermanas, hermanos y sobrinos. Para mí, mi familia es muy importante. Me encanta estar en mi casa, jugar pádel, que me dé el sol, pasar tiempo con mis amigas, reír, filosofar, escuchar música. Amo cantar y bailar.
¿Qué aprendizaje te ha dejado el arte?
Que el mundo es hermoso, que todos tenemos un camino por recorrer y hay un universo entero esperando que lo hagamos, nunca es tarde para perseguir un sueño.
