El joven espada torreonense se presentó en una taurinísima localidad queretana para buscar seguir creciendo en su toreo. (CORTESÍA)
Una tarde inspirada y triunfal vivió el novillero lagunero Arturo Gilio Quintero el pasado sábado cuando cortó tres orejas durante su actuación en la plaza de toros de Juriquilla, Querétaro, en una novillada en la que todos los alternantes lograron tocar pelo.
Continuando con su temporada 2022, el joven espada torreonense se presentó en una taurinísima localidad queretana para buscar seguir creciendo en su toreo, al alternar con Tarik Othón, Jorge Martínez y Manuel Perera, quienes igualmente están en el camino hacia la alternativa. Poco menos de media entrada en los tendidos, observó una magnífica novillada de la ganadería de Río Tinto, propiedad de Don Miguel Barroso, que envió estupendos ejemplares, de imponente presencia y que ofrecieron muy buen juego para lucimiento de los alternantes.
Gilio lució con gran temple y valor en el ruedo, enfocado en una nueva tarde que le significó la oportunidad de dejar atrás las fallas con el acero que acusó ocho días atrás y vaya que lo hizo, pues logró hundir hasta el fondo la espada durante las dos ejecuciones de la suerte suprema. A su primer astado, Arturo le cortó una oreja tras faena bien elaborada por el pitón derecho, mientras que en el segundo ejemplar, el lagunero tejió largas tandas frente a un gran novillo y terminó por cortarle las dos orejas, para salir a hombros junto al resto de los alternantes.