(CORTESÍA)
El novillero lagunero, Arturo Gilio Quintero, se llevó el gato al agua al cortar la única oreja y proclamarse triunfador este sábado 24 de septiembre, en una difícil novillada que tuvo lugar en la Plaza de Toros de Algemesí, Valencia, España.
La dificultad de la tarde recayó en los distraídos y complicados que fueron los cuatro novillos de la ganadería de Torrestrella, quienes les complicaron la vida a los jóvenes alternantes, Arturo Gilio y Miguelito, quienes sudaron en serio para completar sus lidias. Al primero de su lote, Arturo le extrajo muletazos de mucho aguante y exposición, realizando una faena muy por encima de las condiciones de su enemigo; dejó una estocada que no tuvo los efectos deseados, por lo que tuvo que recurrir al descabello, saludando en el tercio al recibir una fuerte ovación.
Con el segundo de su lote, el lagunero mostró variedad con el capote, mientras que con la muleta estructuró una faena de altos vuelos, ante un novillo que regateaba las embestidas, pero el aguante y tenacidad de Arturo emocionaron al público que llenó los tendidos y que coreó fuertemente cada una de las tandas, dejó tres cuartos de acero al primer viaje, con el efecto esperado, para que el juez le otorgara una oreja de mucho peso, con la que dio la vuelta al ruedo, convirtiéndose en el triunfador de la tarde.
Su alternante, Miguel Senet “Miguelito”, no tuvo suerte en su lote, conformándose con una vuelta a al ruedo ante su segundo novillo.