EL SIGLO DE TORREÓN
Un gran ambiente se vivió dentro del FIFA Fan Fest, donde más de 2000 personas se dieron cita para apoyar a la Selección Mexicana en su último partido de la fase de grupos ante el combinado de Arabia Saudita.
A pesar de que el clima estaba caluroso, reinaba en el Monumento a la revolución, el buen ánimo de los aficionados no faltó en ningún momento, donde resultados como 4-0 y “pierde Argentina” se repetían en diversas ocasiones dentro de la plaza pública.
Las caras largas se hicieron presentes en cierto momento, después de que Leo Messi fallara un penal en el otro partido, que ayudaría al Tri para conseguir con más facilidad su pase a octavos de final
Tuvieron que pasar un tiempo y tres minutos para que la algarabía se hiciera presente, cuando Henry Martín envió el balón al fondo de las redes, haciendo estallar a las almas presentes con el grito de gol, donde no faltaron vasos de diversas bebidas volando por la emoción de la “ola tricolor”.
Algunos aficionados apenas regresaban de los puestos de comida, cuando cayó el segundo gol de los dirigidos por Gerardo Martino, después de que Luis Chávez, con un soberbio tiro libre, decretara el 2-0 momentáneo y lograra que las expectativas de los presentes sobre una probable calificación creciera aún más.
Los nervios aumentaron con las anotaciones de Argentina, llenando el Monumento a la Revolución con un ambiente de nervios, resonando el clásico grito de “sí se puede”, además del ingreso de Rogelio Funes Mori y Raúl Jiménez al campo, que acrecentaba el sentimiento de la calificación, sin embargo, los ánimos decayeron con la anotación en tiempos extra de Dawsari, que apagó toda emoción dentro de la plaza.
Las lágrimas no se hicieron esperar, puesto que había mucho entusiasmo por la calificación del Tri a octavos de final, que terminó por no avanzar a la segunda fase como en los últimos 7 mundiales, dejando el proceso del argentino Gerardo Martino como un rotundo fracaso, palabra que algunos aficionados vociferaban a lo largo de la explanada, que no terminaban por comprender que la selección mexicana había caído dentro de la Copa del Mundo.