
Para explorar y disfrutar de la sexualidad es necesario e importante contar con información real, tanto como la higiene y la confianza mutua.
Las formas de vivir y experimentar la sexualidad humana son amplias y diferentes. Para tener prácticas sexuales seguras y placenteras, es necesario contar con información confiable que nos permita tomar decisiones acertadas y bien cimentadas.
Juzgar a las personas por su manera de vivir la sexualidad es una práctica arcaica, señaló el Dr. Juan Carlos Escobedo, Coloproctólogo y subespecialista en Cirugía de Colon, Recto y Ano.
LA SALUD ES LO PRIMERO
“Al hablar de las enfermedades venéreas anorrectales podemos mencionar las más comunes como son el Virus del Papiloma Humano que son los condilomas perianales, un área de la que me ocupo un poquito más y obviamente hay más padecimientos como el molusco contagioso, gonorrea, sífilis y clamidia trachomatis”.
“Evidentemente los contagios se dan por relaciones ano-genitales entre personas que traen carga viral positiva a este tipo de problemas”.
Hoy en día es una situación muy común, prácticamente la incidencia es mayor entre pacientes jóvenes, entre los 16 y 35 años aproximadamente, donde la exposición aumenta por el número de parejas sexuales activas y por la falta de precaución al mantener relaciones de manera casual”.
CONFIANZA Y COMUNICACIÓN, INDISPENSABLES
Primero que nada tienes que conocer a tu pareja, tener una excelente comunicación, si estamos hablando de una relación formal o monógama es necesario indagar un poquito sobre sus anteriores encuentros sexuales, su historia de enfermedades como tal”.
“Aquí hay una situación complicada, pues la gran mayoría de las ETS, sobre todo el VPH, es una enfermedad que en el 99% de los casos, el paciente no sabe dónde lo contrae. ¿Por qué? Porque es un virus que se queda latente en el cuerpo, está ahí, lo puedes tener pero para que se exprese deben de coincidir varios factores, entre los cuales la carga viral es fundamental”.
“Es posible que alguien porte el virus pero sea asintomático, que tenga relaciones sexuales con una persona que no presenta el virus y de esta manera transmitirlo, pero la pareja en cuestión puede no darse cuenta hasta muchos años después, cuando 'aparece' físicamente una lesión”.
UN ÁREA DELICADA Y A LA VEZ ELECTRIZANTE
Las lesiones provocadas por una mala práctica sexual o el uso inadecuado de juguetes cada vez es menor, pues a decir del Dr. Escobedo, las personas cada vez están más ávidas de conocimiento y comienzan a investigar.
“Actualmente las personas están más letradas en cuestión de cómo preparar esta zona, pero es importante que, para quien no tenga todos los detalles, se acerque con un especialista o se informe, con el objetivo de evitar problemas y lesiones”.
“La mayor parte de los pacientes saben que una adecuada lubricación utilizando productos a base de agua, una protección de barrera como lo es el preservativo y una preparación tanto física como emocional es muy importante, ya que cuando un paciente no se encuentra relajado completamente, la tensión de su cuerpo hace más complicada una relación placentera y complica la penetración, pudiendo provocar lesiones por fricción extrema”.