Se trata de una problemática que se acentúa por las condiciones de adicción que aquejan a la gran mayoría de estas personas.
Una cuantificación realizada por autoridades municipales estimó que en las calles de la capital duranguense deambulan unas 70 personas que viven en situación de calle.
Sandra Corral, directora del sistema DIF Municipal, admitió que se trata de una problemática que se acentúa por las condiciones de adicción que aquejan a la gran mayoría de estas personas, pero que no pueden ser atendidas por las áreas correspondientes debido a la falta de interés de sus familiares.
Explicó que la intervención del DIF Municipal en estos casos, implica trasladar a estas personas al Hospital de Salud Mental, donde son atendidos inicialmente y medicados, pero luego son dados de alta.
"Es un círculo vicioso que no hemos podido erradicar y que estamos intentando atender de la mejor manera posible", dijo.
Entre los motivos por los que son "sacados" del Hospital de Salud Mental, se encuentra la falta de compromiso de las familias de estas personas en situación de calle para hacerse responsables de su hospitalización, por lo que todo se concreta a atención ambulatoria.
El padrón tiene detectado que aunque hay personas en situación de calle de 25 adultos mayores, el promedio son jóvenes de 35 a 39 años de edad.
En lo que concierne al DIF Municipal, dijo que se cuenta con un comedor comunitario donde se da de comer a todas las personas en situación de calle.
"Tenemos contacto con algunos centros que tratan adicciones, nos hacemos cargo también de los medicamentos porque no tienen una familia que se haga responsable y los internamos durante tres meses. Después, salen deberían tener un soporte familiar que los mantenga en abstinencia; sin embargo, es muy difícil. A lo mejor un 25 por ciento tiene familia, pero ya no los aceptan", señaló.
