El avión, según Ojeda, llegó el 10 de agosto a Cuernavaca.
La Fiscalía General de la República (FGR) inició las investigaciones sobre el robo del avión matrícula XB-PYZ, ocurrido el martes en el aeropuerto de esta ciudad. Por principio, tomó las declaraciones del personal de la terminal aérea, en particular de los directivos y empleados de la empresa International Corporate and Cargo Services (ICCS), en cuyo hangar privado se encontraba estacionada la aeronave.
De las indagatorias, dijo el secretario de Gobierno de Morelos, Pablo Ojeda Cárdenas, destaca la ausencia del propietario del avión, una persona de nacionalidad mexicana que no ha sido identificada y que hasta ayer no había presentado la denuncia correspondiente por robo.
El avión, según Ojeda Cárdenas, llegó el 10 de agosto al Aeropuerto Mariano Matamoros de Cuernavaca, procedente de Toluca, y su certificado de aeronavegabilidad había caducado, por lo que su matrícula ya no era vigente y llevaba más de un mes resguardada en la empresa ICCS.
También informó que el aeropuerto cuenta con sistema de video y, por lo tanto, se tienen los rostros de los autores materiales, que se identificaron como mecánicos, así como las credenciales que presentaron ante el ICCS. "El ingreso de los tres hombres fue autorizado por la empresa ICCS, los representantes firmaron una carta responsiva y les permitieron el acceso", dijo. También afirmó que se encuentran a la espera del peritaje forense sobre las víctimas del siniestro aéreo para cotejarlo con los rostros e identificaciones.
HALLAN OTROS DOS CADÁVERES
La Fiscalía General de Guatemala halló este jueves otros dos cadáveres en la zona donde la noche del martes se estrelló el jet Hawker 800, el cual, presuntamente, fue robado en México, con lo que sumarían cuatro las víctimas mortales del accidente.
Fuentes de la fiscalía guatemalteca informaron que uno de los muertos es Jeankarlo Meneses, un narcotraficante guatemalteco que el 17 de marzo de 2019 se fugó de la cárcel Mariscal Zavala.
El Instituto Nacional de Ciencias Forenses de Guatemala (INACIF) identificó al narcotraficante mediante sus impresiones dactilares, informó el periódico Prensa Libre.
