
Recientemente ha salido a la luz un estudio que revela cómo los hongos alucinógenos podrían ayudar en los tratamientos contra la depresión cuando otros métodos han fallado. Esto debido a un ingrediente activo llamado psilocibina. (ESPECIAL)
Recientemente ha salido a la luz un estudio que revela cómo los hongos alucinógenos podrían ayudar en los tratamientos contra la depresión cuando otros métodos han fallado. Esto debido a un ingrediente activo llamado psilocibina.
El estudio comparó lo efectos de una dosis de 10 mg con 25 mg de psilocibina y un placebo. No presentaron eventos graves ni efectos negativos sobre la función cognitiva y emocional del sujeto, según un comunicado de prensa de Compass Pathways.
En cambio, los voluntarios si presentaron cambios en la percepción sensorial y alteración positiva del estado de ánimo.
Los resultados del estudio realizado por los científicos del Imperial College en London, son clínicamente tranquilizadores, ya que respalda un mejor uso del psilocibina como alternativa cuando los pacientes ya han intentando mejorar con la terapia convencional y no les ha dado resultados.
Cabe destacar, que esto se trata de la primer parte del estudio. Para la segunda parte participarán 200 pacientes con depresión en Europa y América del Norte.
Según la Organización Mundial de la Salud, más de 264 millones de personas en el mundo sufren de depresión, y aunque por lo general el tratamiento antidepresivo se trata con fármacos como Prozac, que aumenta los niveles de serotonina en el cerebro para mejorar el estado de ánimo, este tipo de antidepresivo no funciona igual para todos. Además, debe ser llevado como un tratamiento a largo plazo para ver resultados.
Por otro lado, el tratamiento con hongos alucinógenos alteran rápidamente la función cerebral, por lo que algunos investigadores sugieren que los pacientes podrían tratarse con pocas dosis si esta va acompañada de terapia.
Esta investigación podría enfocarse en afecciones de la salud mental, incluida la ansiedad, la depresión, adicción y trastorno obsesivo compulsivo (TOC).
Según el King’s College London podría relajar partes del cerebro que controlan estos comportamientos, permitiendo que estos patrones cambien o desaparezcan.
Los tratamientos alucinógenos aún requieren de estudios para llevarlos a cabo como un tratamiento desarrollado y desplegado.