Entre los trabajos de la ebanistería se encuentra la precisión con cortes hechos a mano. (FERNANDO GONZÁLEZ)
La ebanistería es un oficio de tradición. Es la rama de la carpintería especializada en la elaboración de muebles finos que cuentan con un gran detalle, un acabado impecable y una gran resistencia al paso de los años.
En Torreón, es un oficio que aunque poco común, aún puede encontrarse entre sus calles. Ese es el caso de la ebanistería de Ramón González Luna, ubicada en la Prolongación Comonfort y avenida Hidalgo, en la zona centro de la ciudad.
El recorrido de Ramón por el oficio de ebanista inicia a los 12 años de edad en un taller donde junto a sus tíos, Carlos Luna y Alejandro Serrano, quienes también, más o menos a la misma edad (15 o 18) empezaron lo que sería una tradición familiar.
En aquel entonces, Ramón trabajaba y estudiaba, sin embargo, siempre prefirió el oficio ebanista, ya que cortar, armar, lijar, pintar, y sobre todo, detallar es algo que siempre le ha gustado.
Hoy, ya con 52 años de edad, es decir 40 años de trabajar y desarrollarse en un taller, donde junto a sus compañeros, se elaboran muebles de gran calidad para las personas de la Comarca Lagunera.
EL PROCESO
Si bien, la creación de un mueble fino cambia dependiendo de las características que el mismo necesita, el procedimiento suele ser más o menos el mismo, siempre de la mano de una gran precisión y cuidado.
Primero, junto al cliente, los ebanistas trabajan el diseño específico del mueble que se desea, que por lo común, suelen ser vestidores, puertas principales, comederos, bufeteros, pero que puede abarcar todo tipo de pieza.
Después, se elige la madera idónea para el diseño, esta misma se secciona, ya sea a mano o a máquina, por medio de alguna de las muchas sierras de las que se hacen uso, y se ensambla adaptando las piezas con cortes hechos a mano o máquina.
Luego, si es necesario, el mueble pasa a ser tallado para formar desde líneas u otras figuras geométricas hasta dibujos que realcen a la pieza.
Posteriormente, el diseño es lijado o alisado y por último se pinta o se le da el acabado deseado por el cliente.
LA TRADICIÓN
Hace ya unos años, Ramón se encontraba ubicado por la calzada Gómez Morín, entre la colonia Merced y la División del Norte, mas la falta de espacio le hizo mudarse.
Él, al conocer a la dueña de la bodega donde actualmente se ubica (prolongación Comonfort y avenida Hidalgo), desde hace ya 15 años, tuvo la gran oportunidad de encontrar ese espacio necesario para seguir y además mejorar su trabajo como ebanista.
Si bien, se piensa que es este uno de los oficios que se enfrentan a la adversidad por el mercado, los 40 años de presencia de Ramón González en esta especialidad de la carpintería le permiten asegurar que esto no es así.
Él piensa que sus clientes le han sido fiel, pues estos son trabajos que las familias suelen desear, y si los padres o los abuelos acuden a una ebanistería para la fabricación de alguno de los muebles, es probable que el hijo lo haga de la misma manera, siendo como se han podido mantener en el mercado, pero por supuesto, invitando a todos a acercarse.
Ramón González Luna, ebanista desde su niñez, sigue diseñando y siendo una persona apasionada de lo que hace. Sus herramientas, entre las que están la sierra de banco, sierra cinta, troceros, cepillos, gurbias, escuadras y taladros continúan haciendo un trabajo de calidad en muebles para todo tipo de diseños, cortados, armados, tallados, lijados y pintados de la mejor manera posible.
Ebanistería
El arte de trabajar la madera.
-Oficio de tradición que diseña y elabora muebles finos.
-Trabajo en el que se usan sierras, troceros, cepillos, escuadras y taladros para cortar, armar, tallar y lijar.
-El taller de Ramón González se ubica en prolongación Comonfort y avenida Hidalgo.
