El presidente de Rusia y Turquía han prometido el eliminar a todos los terroristas de Idlib. (EFE)
Rusia y Turquía reconocieron el día de ayer la falta de progresos en la provincia siria de Idlib, controlada por grupos rebeldes e islamistas, pero prometieron hacer todo lo posible para erradicar cuanto antes el último foco terrorista.
"Espero que nuestros esfuerzos conjuntos ayuden a normalizar la situación en Idlib y en los alrededores y nos permitan erradicar el último foco terrorista" en el último bastión opositor en el norte de Siria, afirmó el presidente de Rusia, Vladímir Putin, en una rueda de prensa tras entrevistarse en Moscú con su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan.
Los dos encabezaron este lunes el VIII Consejo de Cooperación de Alto Nivel ruso-turca y se reunieron con empresarios de ambos países, antes de inaugurar el Año de la Cultura y el Turismo de Turquía y Rusia.
Tras varias horas de conversaciones, en las que abordaron entre otras cuestiones el conflicto en Siria, el mandatario ruso admitió ante la prensa que "la situación en Idlib es muy grave".
Para Erdogan, "hasta que no estén eliminados todos los terroristas en Siria existe una amenaza a nuestra seguridad nacional y no habrá paz".
Consciente de que Turquía es "la única área" a la que pueden huir los residentes de Idlib si se agrava la situación, Erdogan subrayó que trabajan para dar seguridad a los ciudadanos.