El coordinador regional del Gobierno federal alertó proteger a las 31 familias que están en riesgo latente. (EL SIGLO DE TORREÓN)
El 15 de mayo comenzó oficialmente la temporada de lluvias, y las zonas de alto riesgo de inundación siguen habitadas.
Es el caso de los asentamientos ubicados en los alrededores de la presa del Hielo, donde tras desbordarse en el 2016 murieron cinco duranguenses.
Pese a que en dicho año el fenómeno conocido como la Tormenta Perfecta dejó varios muertos ahogados en la inundación, las medidas para contener el riesgo han sido mínimas, a decir de las nuevas autoridades federales.
Gustavo Santiago Pedro Cortés, coordinador regional del Gobierno Federal, informó que el miércoles pasado se realizó una reunión en la Comisión Nacional del Agua (Conagua), donde se abordó este tema y el río El Tunal.
Sin embargo admitió que hay preocupación porque esta es la primera reunión que se realiza para analizar la aplicación de medidas que eviten que se registre algo similar a lo de hace tres años.
Destacó que Durango presenta lluvias atípicas, “en poquito tiempo llueve mucho”, por lo que se deben implementar acciones urgentes.
Este viernes autoridades de los tres órdenes de gobierno acudirán a los asentamientos que se encuentran en las inmediaciones de esta represa.
El coordinador regional del Gobierno federal admitió que hay temor. Las familias han reportado taponamiento de los vertederos, así como que el lugar es utilizado como basurero de escombros.
“Estamos preocupados (...) quisiéramos acelerar las cosas para que no muriera nadie como la vez pasada por acciones que no se hicieron a tiempo”, manifestó.
Otro factor que empeora la situaciónes, dijo, son las indefiniciones jurídicas que inhiben la actuación de las autoridades, ya que no se sabe si el tema compete al Instituto Nacional del Suelo Sustentable (Insus), Conagua o Ayuntamiento de Durango.
