Aseguró el jefe de la oficina de la presidencia que se escucharán propuestas por parte de delegaciones extranjeras, pero lo que importa será la decisión que tomarán. (ARCHIVO)
Las autoridades iraníes restaron ayer relevancia a los intentos de mediación de terceros países, como Irak, para rebajar la actual tensión entre Irán y Estados Unidos, y negaron que Omán esté ya actuando de mediador.
El jefe de la oficina de la presidencia de Irán, Mahmud Vaezí, aseguró que escucharán la propuesta de los mediadores, pero que lo importante es la decisión que Teherán tome al respecto.
"No les decimos (a los iraquíes) que no envíen una delegación. Vendrán y les escucharemos, pero lo que importa es qué decisión tomaremos sobre su propuesta", explicó Vaezí, citado por la agencia Tasnim.
El primer ministro iraquí, Adel Abdelmahdi, anunció el pasado martes que enviará delegaciones a Estados Unidos e Irán, ya que ambos países le han asegurado de que no buscan una guerra.
Además de Irak, otro tradicional mediador ha sido Omán, cuyo ministro de Exteriores, Yusuf bin Alawi, se reunió hace dos días en Teherán con su homólogo local, Mohamad Yavad Zarif.
Sin embargo, el jefe de la oficina de la presidencia negó hoy que esta visita a Teherán estuviera relacionada con algún intento de mediación.
"No se habló en absoluto de mediación en las conversaciones" entre Alawi y Zarif, zanjó Vaezí.
La posibilidad de un conflicto entre Irán y Estados Unidos ha hecho saltar las alarmas entre la comunidad internacional, por lo que a los llamamientos a la calma se han sumado las ofertas de mediación.
Hoy mismo, el embajador de Kazajistán en Teherán, Askhat Orazbai, declaró que su país está dispuesto a acoger conversaciones entre Irán y Estados Unidos, como hace en el caso de Siria.
"Si Estados Unidos quiere negociar con Irán y Teherán lo acepta, estamos listos para organizar las conversaciones", dijo el embajador, quien no obstante reconoció que tales negociaciones "no están en la agenda" por ahora.
El presidente estadounidense, Donald Trump, ha dicho en varias ocasiones que está dispuesto a negociar con los líderes iraníes, después de retirar a su país del acuerdo nuclear multilateral de 2015 y volver a imponer sanciones a Irán.
Al mismo tiempo, en los últimos días, ha elevado su retórica belicista, advirtiendo el domingo a Teherán de que si quiere pelear, será su "fin oficial".
La respuesta de Teherán ha sido de claro rechazo de nuevas negociaciones.
El presidente iraní, Hasan Rohaní, aseguró el lunes que "no es el momento de la negociación, sino de la resistencia", en la misma línea marcada por el líder supremo, Ali Jameneí, quien la semana pasada descartó tanto una guerra con Estados Unidos como negociaciones.
Estados Unidos ha decidido desplegar en el golfo Pérsico el portaaviones USS "Abraham Lincoln", el buque de asalto anfibio USS "Arlington", misiles Patriot y bombarderos, y ha retirado de Irak al personal no indispensable de su embajada por supuestos indicios de amenazas.
Por otra parte, el legislador Heshmatollah Falahatpisheh comentó que Irán no entrará "bajo ninguna circunstancia" en una guerra con Estados Unidos, ya sea directa o a través de fuerzas aliadas.
"Ningún grupo puede anunciar que ha iniciado una guerra indirecta desde el lado de Irán", señaló.