Retrasos. El lunes 8 de enero, Ivón se presentó en la Procuraduría, donde se tardaron en atenderla por el festejo de día de Reyes. (EL SIGLO DE TORREÓN)
A las 10:30 de la mañana del pasado 2 de enero el auto de Ivón que estaba debidamente estacionado en las afueras de la empresa donde labora, calzada Lázaro Cárdenas número 786 de la colonia Eduardo Guerra, fue chocado por un vehículo Onapafa que circulaba con exceso de velocidad.
Varios empleados del lugar salieron al escuchar el ruido provocado por el fuerte impacto, entre estas personas, Ivón propietaria de la unidad, quien rápidamente trató de abrir la puerta del auto del desconocido conductor, pero éste, lejos de asumir una postura responsable accionó velocidad a su vehículo emprendiendo la huída.
Cámaras instaladas en las afueras de la empresa captaron el momento del choque, una placa y un pedazo de la defensa del vehículo responsable cayeron al suelo, además momentos después de la colisión, Ivón fue avisada por unas personas que el auto que chocó su vehículo se encontraba estacionado, abandonado en la prolongación Marcelino, casi esquina con calle Del Patriarca en la colonia La Fuente.
Teniendo todos estos factores a su favor, Ivón pensó que sería muy sencillo reportar lo ocurrido y lograr la intervención de las autoridades, la aplicación de la justicia y finalmente la reparación del daño.
Días antes, recordó Ivón, dialogaba con unas amigas que había escuchado en la radio una entrevista hecha a un representante de la Procuraduría, quien exhortaba a la gente a denunciar los delitos, y todo tipo de hechos con la plena seguridad de que todos los asuntos se llevan hasta sus últimas consecuencias.
Peritos del departamento de Tránsito, acudieron al lugar donde ocurrió el choque, solicitados por la afectada, sin embargo, se concretaron a levantar un acta de lo sucedido y le informaron a Ivón que no podían hacer nada, pues no estaba presente la persona que causó el daño, exhortándola a presentar la denuncia.
Momentos después, al ser enterada del lugar donde se encontraba el auto responsable, Ivón, se trasladó a la colonia La Fuente y efectivamente constató el reporte optando por llamar nuevamente a los peritos y un par de agentes de la DSPM. Los representantes de la autoridad tomaron fotos, datos, placas, pero le dijeron que tenía que presentar la denuncia. No podían solicitar grúa, pues podrían ser acusados de robo.
¿Entonces cuando uno choca, es preferible escapar?, cuestionó Ivón a los preventivos, uno de los cuales le dijo que así son las cosas, y separándola del grupo, le aconsejó que le ponchara las llantas al vehículo responsable, pues lo más seguro es que durante la noche irían por él. Ivón no lo hizo.
El lunes 8 de enero, Ivón se presentó en la Procuraduría -Periférico Raúl López Sánchez--, donde tardaron en atenderla, pues parte del personal estaba comiendo rosca de reyes. Tras larga espera, Ivón levantó la denuncia expediente 00023-TOR-VAI-2018 por daños por culpa dirigida a Asuntos Viales. Fue informada que había que girar una orden y tenía dos opciones: esperar a que llevaran el documento al área de Servicios Periciales, o bien, llevarlo ella para que fuera más rápido.
El mismo 8 de enero, Ivón se trasladó al edificio que alberga las oficinas de Servicios Periciales, ubicadas rumbo a Matamoros por el manto de la Virgen. Aunque acepta que en ese lugar el trato fue amable, explica impotente, que el resultado no fue favorable, pues le dijeron que tenía que regresar al Periférico a entregar el acta para su firma y después se levantaría otra acta para empezar a averiguar de quién son las placas del auto Onapafa. "De momento lleve su carro con un valuador", le indicaron.
El lunes 15 de enero, Ivón acudió nuevamente a la Procuraduría en Periférico para conocer el posible avance de su asunto, aunque no podía dejar de pensar que lo más seguro es que el responsable del choque ya había vendido su vehículo, cambiado de placas, o bien, cualquier otro tipo de maniobra para esquivar su responsabilidad.
Ese día le dijeron que no habían enviado la orden, confirmando Ivón, que ni siquiera habían abierto el expediente, señaló que le daban largas al asunto ofreciendo cualquier explicación para que se retirara.
Una de sus hermanas le dijo que así dejara ya el asunto, que ella le ayudaría a pagar la reparación de su auto. "Son puras vueltas y no te resuelven", comentó.
El jueves 25 de enero, Ivón se presentó nuevamente en la Procuraduría, donde le indicaron que ahora sí ya iban a enviar el reporte al área de averiguaciones.
Según el valuador, Ivón debe pagar 5 mil 800 pesos por la enderezada de su auto, un gasto que no estaba contemplado en su economía. Reconoció que su estado es de frustración por la irresponsabilidad mostrada por la persona que la chocó, pero más por la defensa que tiene la sociedad en sus autoridades. Explicó que a casi un mes del accidente, y con todos los elementos para dar respuesta inmediata al asunto, ni siquiera ha iniciado una averiguación.
