La Asociación Mexicana de Empresas de Hidrocarburos (Amexhi) advirtió sobre los riesgos de interrumpir la continuidad del nuevo modelo energético mexicano, y quien gane en las próximas elecciones presidenciales deberá tomar conciencia de que el país no puede detenerse.
Durante la presentación de la Agenda 2040: Transformado a México, el organismo que aglutina a 50 de las principales empresas del sector energético mexicano destacó que "la diferencia entre buenas y malas decisiones en el sector energético podría ser equivalente a 4% del Producto Interno Bruto (PIB) nacional.
"Malas decisiones y falta de continuidad podrían mermar el factor económico y de producción petrolera, y también habrá un costo de oportunidad de 1.6 veces el presupuesto total de la Secretaría de Desarrollo Social, 1.4 veces el presupuesto de la Secretaría de Salud y 0.6 veces el presupuesto de Educación Pública en los próximos 20 años", alertó el organismo.
Enrique Hidalgo, presidente de ExxonMobil Exploración y Producción México, comentó que el contraste entre mantener el sector energético en sintonía con una economía abierta o hacer una vuelta al pasado lleva a dos escenarios muy distintos para México en 2040.
Alberto de la Fuente, presidente de la Amexhi y presidente y director general de Shell México, dijo que para 2040 los yacimientos hoy activos "disminuirán su producción 85%".
En México, detalló, sólo 2% de la producción histórica acumulada viene de campos petroleros que iniciaron con labores de extracción en los últimos 25 años. Por ello, dijo, "para construir el futuro debemos empezar a descubrir, desarrollar y aprovechar nuestro potencial energético lo más rápido posible".
Señaló que si México es constante en la construcción de mercados competitivos y con rendición de cuentas, su producción actual podría crecer hasta 40% y agregar más de un billón de dólares al PIB.