
El juez de silla Mohamed Lahyani estuvo ayer un partido de dobles.
El juez de silla que se bajó de su asiento para charlar con Nick Kyrgios durante un partido de la segunda ronda no fue sancionado por los directivos del Abierto de Estados Unidos.
Un "análisis pormenorizado realizado por varios directivos del torneo" determinó que la conversación del juez de silla Mohamed Lahyani con Kyrgios "excedió los límites de nuestro protocolo", dijo ayer el portavoz de la Federación Estadounidense de Tenis Chris Widmaier.
Pero Widmaier indicó que Lahyani no será sancionado al considerarse su "trayectoria ejemplar como árbitro en el tenis internacional".
"Ahora tiene un mejor conocimiento de nuestros protocolos y fue informado que deberá seguir esos protocolos por el resto del torneo", dijo Widmaier. "Cada uno de sus partidos será monitoreado".
Lahyani fue asignado para dirigir un partido de dobles en la Cancha 13 el viernes.
El jueves, Kyrgios lució desganado tras perder el primer set y rezagarse 3-0 en el segundo ante Pierre-Hugues Herbert. Durante un cambio de lado, Lahyani se bajó de la silla - algo que rara vez se da en un torneos en los Grand Slam tennis - para charlar con el australiano. Se puso de rodillas y le dijo: "Quiero ayudarte".
Kyrgios acabó venciendo a Herbert y enfrentará hoy a Roger Federer en la tercera ronda.
Herbert dijo el jueves que Lahyani debió haber sido ser sancionado por su conducta.
Combativo y sarcástico durante una rueda de prensa tras el partido, Kyrgios se mofó de que se sugiriera que Lahyani le había alentado.
"Es que yo no tengo entrenador. Llevo varios años sin entrenador. Desde luego que no me estaba dando consejos. ¿De qué hablan?", dijo Kyrgios.
Kyrgios ha protagonizado incidentes polémicos en el pasado por no esforzarse al máximo, e incluso fue multado y sancionado por la ATP en 2016.
"A veces tiene la menta puesta en otra parte", comentó Herbert.