Costoso. El gas LP que se vende en La Laguna es de los más caros del país, sostuvo Cecilio Campos, dirigente del PRD. (EL SIGLO DE TORREÓN)
El presidente del Partido de la Revolución Democrática en Gómez Palacio, Cecilio Campos Jiménez sostuvo que el gas licuado de petróleo (LP) que se vende en La Laguna es de los más caros del país, incluso por encima de zonas como el Estado de México, Nuevo León o Jalisco.
En alusión a los incrementos a este insumo, señaló que con la reforma energética y la liberación de los precios de los energéticos, desde inicios de del 2017 y todo ese año el gas LP aumentó constantemente.
Esto se dio sobre todo en la región Lagunera, con un incremento acumulado a la fecha de más de un 50 por ciento, causando un impacto muy negativo en la economía familiar.
De 13.35 pesos que en promedio costaba el kilo de gas LP hace poco más de un año, se ha disparado a los 22.02 pesos.
Dependiendo de las zonas del país el aumento porcentual ha sido incluso mayor, en relación a su precio del mes de diciembre de 2016.
Campos Jiménez dijo que el presidente Enrique Peña, había asegurado desde el Gobierno federal que, con la reforma energética se beneficiaría a los consumidores, y que los precios de los combustibles iban a bajar, pero como oportunamente advirtió el PRD, sucedió todo lo contrario. También el costo de las gasolinas y el diésel se ha estado elevando sin cesar, destacó.
El PRD anticipó que se estaba engañando a la población y que no era creíble que los mexicanos fuéramos a pagar menos por estos insumos tan importantes.
"La intención del gobierno con su presumida reforma no era apoyar el bolsillo de los mexicanos sino vaciarlos", dijo Campos Jiménez.
Señaló que en la actualidad, el cilindro de 30 kilogramos alcanza un precio de 660 pesos, cuyo llenado se podía hacer a un precio mucho menor hasta hace algunos meses.
La escalada de precios de los energéticos está ocasionando fuertes presiones inflacionarias, encareciendo bienes y servicios básicos en detrimento de los que menos tienen.
"Las falsas promesas del gobierno de Peña se están cayendo a pedazos, y los ciudadanos lo comprueban al percatarse que cada día es más difícil lograr el sustento familiar, y que con los aumentos el poder adquisitivo de los salarios se pulveriza cada vez más, que ya no alcanzan ni para tortillas", dijo.
Nadie se hace ilusiones de que esta alza desmedida de precios vaya a detenerse, porque se están registrando más incrementos desde el arranque del 2018.