El miércoles y jueves pasado el ministro de Relaciones Exteriores chino, Wang Yi, estuvo en la capital rusa en calidad de enviado especial del presidente de China, Xi Jinping. (ARCHIVO)
La guerra comercial de Estados Unidos con Pekín y las represalias diplomáticas de Washington a Moscú están acercando aún más a China, segunda potencia económica, con Rusia, segunda potencia militar.
El miércoles y jueves pasado el ministro de Relaciones Exteriores chino, Wang Yi, estuvo en la capital rusa en calidad de enviado especial del presidente de China, Xi Jinping.
En el marco del encuentro con su homólogo ruso Sergéi Lavrov, Wang dijo que "las relaciones entre China y Rusia se encuentran en el mejor nivel de la historia y las dos naciones tienen que fortalecer aún más su cooperación en vista de los diferentes elementos de incertidumbre de las agendas internacional y regional", según reportó la agencia estatal Xinhua.
"China seguirá apoyando los esfuerzos de Rusia por salvaguardar sus legítimos intereses y por desempeñar un papel más amplio en los asuntos internacionales y regionales", dijo el canciller chino.
Este nuevo acercamiento se da en la misma semana en la que el presidente estadounidense Donald Trump anunció la aplicación de más aranceles a las importaciones provenientes de China y confirmó las sanciones a oligarcas cercanos al presidente ruso Vladímir Putin por su "actitud hostil" con Occidente.