Briana es originaria de Saltillo, Coahuila, y trabaja desde hace seis años como supervisora en una planta industrial en Ramos Arizpe. (EL SIGLO DE TORREÓN)
Con 32 años de edad, Briana Aguilar ha invertido casi la mitad de su vida para concretar la transición de su identidad y convertirse en una mujer, lo cual ha significado un giro de 180 grados en su vida tanto para sí misma, como para las personas que la han acompañado y aceptado.
Briana es originaria de Saltillo, Coahuila, y trabaja desde hace seis años como supervisora en una planta industrial en Ramos Arizpe.
Aunque sus estudios alcanzan hasta preparatoria, busca estudiar una ingeniería industrial y una licenciatura. Además tiene dos hermanos y una hermana mayor que son heterosexuales y ya han hecho su vida con sus parejas.