El cimiento de tu salud

Las proteínas son macromoléculas que se forman por medio de una secuencia de moléculas aún más pequeñas llamadas aminoácidos. Cuando comemos un alimento que contiene proteína nuestro organismo trabaja con ellas, las descompone y despedaza en aminoácidos, para después convertirlos en sus propias proteínas. Algunas de las moléculas más importantes de nuestro organismo son las enzimas, hormonas y anticuerpos, que son proteínas que nuestro cuerpo elabora a partir de los alimentos que consumimos.

Nuestro cuerpo genera distintos tipos de aminoácidos, los cuales utilizamos con diferentes finalidades, y aunque algunos de ellos podemos sintetizarlos de manera endógena, diez debemos ingerirlos a través de la alimentación: nuestro cuerpo no puede fabricarlos, y son mejor conocidos como aminoácidos esenciales.

¿Cuales son las funciones de las proteínas en nuestro organismo?

Las proteínas que son fabricadas por nuestro propio organismo a partir de los aminoácidos tienen funciones determinantes para nuestra salud, algunas de esas funciones son las siguientes:

• Estructural: una de las funciones más importantes de las proteínas dentro de nuestro organismo es que sirven como armazón y base de nuestros tejidos y órganos. Las proteínas con importantes para la construcción y reparación de los huesos, músculos, la piel, las uñas, los vasos sanguíneos y pulmones.

• El sistema inmunológico: los anticuerpos que nos defienden de los agentes patógenos, son las proteínas. Específicamente se trata de un compuesto que es formado por una proteína y glúcido, que se llama glucoproteína. Esta se encarga de reforzar y mantener en perfectas condiciones el sistema inmunológico.

• Enzimas: las enzimas son las responsables de acelerar cualquier proceso químico dentro de nuestro organismo, en los últimos estudios científicos aseguran que la cantidad y eficiencia de enzimas del organismo, son factores de suma importancia para nuestra vida.

Las proteínas son fundamentales para que nuestro organismo tenga un buen funcionamiento, se pueden consumir de distintas maneras y existen dos tipos. Las de origen animal y las de origen vegetal, ambas aportan grandes beneficios a nuestro cuerpo que a continuación te daremos a conocer.

Ventajas

• Las proteínas contenidas en la carne animal tiene todos los aminoácidos que son necesarios para nuestro cuerpo y en las cantidades exactas, comer carne es una forma más fácil de ingerir proteinas, la carne aumenta los niveles de proteínas en la sangre y su metabolismo

• Las proteínas provenientes de los vegetales son una extraordinaria fuente donde podemos encontrar gran cantidad de aminoácidos. Puedes aprovecharlos en cereales, legumbres y alimentos integrales.

Desventajas

• La proteína de origen animal deja residuos al sistema en general, cuando el cuerpo ya no puede utilizar más de esos aminoácidos, los desecha a través de la urea, pero los riñones no siempre son capaces de hacer frente a la cantidad de sustancias tóxicas que deben eliminar.

• El problema o inconveniente con las de origen vegetal, es que no disponen con los porcentajes adecuados y es necesario combinarlas.

¡No las consumas en exceso!

El exceso de proteínas muchas de las veces es la causa de numerosas enfermedades como:

• Trastornos cardiovasculares: esto es debido a que la mayoría de las proteínas, concretamente las de origen animal, van acompañadas de grasas saturadas que provocan el aumento del colesterol y puede llegar a obstruir las arterias y empeorar la circulación de la sangre.

• La obesidad es uno de los efectos negativos más comunes,una sobre carga en el organismo puede afectar principalmente a los riñones y al hígado, pues estos son los encargados de eliminar las sustancias de desecho que generan las proteínas.

• Provoca la formación de cálculos renales: pues con ella se elimina mucho calcio proveniente de los riñones y que se queda acumulado formando piedras.

• Aumenta los niveles de fósforo, que es unos principales causantes de la mala calcificación. A esto le debemos sumar que la proteína libera amoniacos, que nos pueden llegar a provocar cansancio y cefaleas e incluso náuseas.