Descartó que con la cancelación del proyecto el cuál anunció este lunes el presidente electo Andrés Manuel López Obrador, haya un riesgo de perder ese dinero. (EL SIGLO DE TORREÓN)
“El dinero de las afores estaba en el fideicomiso destinado para el proyecto y yo creo que todavía no se aplicaban, pero en virtud de que tienen que deshacerse del proyecto, el dinero se regresa a los aportadores”, expresó el senador por Coahuila, Armando Guadiana Tijerina, en relación a la cancelación de la construcción de Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, donde cuatro administradoras de fondos para el retiro invertirían en la obra.
Descartó que con la cancelación del proyecto, el cuál anunció este lunes el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, haya un riesgo de perder ese dinero.
“Pero lo que si es que se tendrán que pagar algunas multas por la cancelación, pero aún así y con todo, hay un ahorro de más de 100 mil millones de pesos, desarrollando Santa Lucía, ampliando el aeropuerto que está actualmente y ampliando el de Toluca”.
Agregó que todo este “dilema” se creó porque no hicieron el proyecto hace algunos 10 años, cuando compró entre el Gobierno de Hidalgo y el federal más de tres mil hectáreas en el área de Tuizayuca y la Ciudad de México, donde dijo se tendría que haber hecho el nuevo aeropuerto, pues incluso en la zona existen las condiciones los 365 días del año para realizar proyectos aeronáuticos.
Reconoció que el anuncio de la anulación de la construcción del aeropuerto provocó momentáneamente una variación del peso y dólar la cual dijo es provocada por los mismos inversionistas del proyecto, “pero debe llegarse a la estabilidad financiera, cuando ya vean las razones técnicas, jurídicas y sociales de porque se canceló”.
“Hay una especulación solamente en el sistema financiero, especulación de unos cuantos, y en este caso los mismos que eran dueños de los terrenos”.
En relación a la aplicación del dinero público en el proyecto, que también pudiera perderse con la cancelación, el senador dijo desconocer cantidades o si se invirtió, pero “yo creo como está tendrá que pagarse y aun así pagando las cancelaciones de los contratos, a parte el proyecto se alargó muchísimo y los costos se dispararon porque estaba todo amañado, pues están los moches de Pedro, de Juan o del otro y eso es lo que tenemos que acabar, necesitamos ética, moral, honradez en el manejo del dinero público”.