
Los jugadores abogaron por Palencia, pero no fue suficiente.
Francisco Palencia goza de una tranquilidad inquebrantable. Nada que reprochar, pues Pumas le dio el primer empujón para echar a andar su carrera como director técnico.
"Estoy bien, siguiendo los lineamientos que se habían marcado cuando yo llegué, los íbamos cumpliendo poco a poco", dijo Paco, luego de su cese el miércoles pasado.
"La reunión que tuve con Rodrigo [Ares de Parga, presidente del club] también la tuvieron los jugadores antes de que me cesaran. Me estaban esperando en la oficina y me dijeron que querían hablar con él, porque sabían que la situación estaba mal y querían que me quedara".