La impresión que dejó Santos Laguna en su presentación en la cancha de Tigres sigue siendo hasta el momento evaluada y discutida por medios de comunicación y fanaticada en La Laguna. En el momento que el señor Santander pite el final del juego de hoy contra el Veracruz se podrá tener una idea más cabal de lo que nos puede esperar de esta versión Clausura 2017 del equipo de nuestra Comarca.
Se supone por lo que se ha manejado en cuanto a declaraciones de directivos y jugadores que la vara colocada como objetivo está bastante alta, por lo tanto y haciendo un sencillo ejercicio de recolección de puntos para llegar a la meta estipulada ésta contempla victorias en casa prácticamente presupuestadas como sería el caso de la de esta tarde. Este es el problema de plantearse retos como el de sumar treinta puntos en el torneo, que por fuerza y lógica para un equipo como los Guerreros históricamente localista la mayoría del porcentaje de puntos obtenidos serían en casa, es decir, ganar hoy a los Tiburones (rival que se presume débil) es prácticamente obligatorio.
Y si me apuran, vencer en la jornada cuatro al Puebla también deberá de entrar al presupuesto de triunfos "garantizados", digo, ¿si vieron como jugó la Franja contra Xolos? La defensa poblana parecía un puñado de borrachos de amanecida echando la pica en la liga de la colonia. Riestra confía plenamente en los treinta puntos que compensarían los horrendos 16 del Apertura
La última vez que me topé a Pepe Riestra le comenté que ya no hiciera tanto énfasis que Santos iría por treinta puntos este torneo, que así le dejara, que con calificar estaría bien, es decir, 25 ó 26 puntos podrían ser suficientes para regresar a la Liguilla, me respondió con absoluta confianza: "vamos por treinta puntos". Esto podría ser irrelevante si no existieran individuos que ya se lo toman personal, "me dijiste treinta puntos, ahora me los cumples" "si haces 29, calificas y eres campeón para mí es un fracaso". De ese tamaño señores, de ese tamaño.
Por cierto, la idea que tenía de Pepe era la de un hombre reservado y si de él dependiera tener el menor roce con la prensa, percepción que también yo tenía de José Manuel de la Torre, no hay como platicar para conocer de primera mano cómo es una persona. Tanto "Chepo" como Pepe son individuos con los cuales y de entrada se puede conversar de manera abierta y franca. Podrán tener ideas y métodos de comportamiento muy suyos que probablemente para algunas personas de piel delgadita incomoden, pero sin duda tienen un fin que les tiene al cien por ciento ocupados, regresar al protagonismo al Club Santos Laguna. Obvio no todos tenemos la posibilidad de echar una platicadita con estos personajes, pero créanme no son los ogros que nos pinta la prensa, sobre todo en el caso de "Chepo" que como él dice, tiene su carácter y cuando alguien le hace una pregunta rayando ligeramente en lo idiota, difícilmente se puede contener para hacerle ver al reportero la insensatez del cuestionamiento.
Pero volvamos al arranque de este Clausura, ocho de los primeros doce puntos en disputa parecen factibles, ya se empató en casa de Tigres, se le gana a Veracruz, se empata en Morelia y se gana a Puebla, después el asunto se torna serio, a partir de la cinco se vienen Chivas en la Perla, se recibe a la Máquina de Jemez, visita a la tierra donde la vida y el Santos no valen nada, nueve puntos contra equipos que deberán de ser contendientes al título de este torneo. Si tienen tiempo y ganas hagan sus presupuestos para este torneo y a ver que les resulta, que como dijo el maestro Sabina en la rola "La del Pirata Cojo" "y como además sale gratis soñar". Yo discúlpenme, me conformo con calificar, que para ello hay que remontar ocho posiciones en relación al torneo pasado y si por ahí se vuelven a dar las cosas, no estorbaría una sexta Copa de Liga en el hermoso Salón de trofeos de nuestro equipo Santos Laguna.
