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Enfrenta economía

ESPECIALISTAS ANALIZAN EL ESCENARIO PARA 2017 EN LA ECONOMÍA NACIONAL

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ELIA BALTAZAR

Los mexicanos despidieron 2016 con el anuncio de un incremento de 3.9% en el salario mínimo -que hoy es de 80.04 pesos por día-, pero recibieron 2017 con el aumento de 20% en el precio de la gasolina Premium, 14% en la Magna y el gas LP con precio liberalizado que podría variar cada mes.

Estos números resumen el panorama de la economía familiar mexicana para este año, que en su cuesta de enero ya acumula aumentos en bienes, servicios y productos, presiones inflacionarias y pronósticos difíciles para el empleo, la inversión, el crédito y la productividad, de acuerdo con analistas.

"Nosotros anticipamos una inflación mucho más alta en 2017. Nuestro pronóstico era de 4.8%y ahora estamos esperando 5% para el cierre de este año", dice Daniela Blancas, coordinadora del Departamento de Estudios Económicos de Citibanamex.

Para contener estas presiones inflacionarias y evitar aumentos "injustificados" en los precios de alimentos, bienes y servicios, luego del llamado "gasolinazo", el pasado lunes el Gobierno federal anunció el Acuerdo Para el Fortalecimiento Económico y la Protección de la Economía Familiar.

Aunque su objetivo principal es preservar el poder adquisitivo de las familias, que los incrementos en los precios sean mínimos y no tocar el costo de la canasta básica para contener la inflación, incluyó 37 medidas "de fondo" que buscan estimular la economía en su conjunto y que son en realidad "el corazón de la propuesta", dice Luis Foncerrada, director del Centro de Estudios Económicos del Sector Privado.

"No se vale que, como la gasolina subió 20%, entonces ese incremento yo lo traspaso a mis productos", dice Foncerrada. Por eso, explica, parte del pacto es vigilar que no haya aumentos injustificados, pero la otra tiene que ver con las medidas de reactivación de la economía y para cuidar el empleo.

Sin embargo, hay signos financieros y presupuestales, y circunstancias internacionales -como el arribo de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos- que rebasan la buena voluntad gubernamental y pueden seguir afectando la economía nacional.

"El 2017 será un año con muchos retos y muchos puntos donde prevalece la incertidumbre", dice Blancas. Entre otros, el gobierno Trump. "Todos sabíamos que, en caso de que ganara, habría condiciones un poco más complicadas para México, sobretodo en comercio, por las políticas proteccionistas que podrían ser un obstáculo para la actividad económica del país", dice Blancas.

 ELEMENTO FUNDAMENTAL

Foncerrada considera que para la economía mexicanahay dos elementos fundamentales: el tipo de cambio y el precio de referencia internacional del petróleo. "La mitad del incremento a la gasolina se debe a su precio internacional y casi la otra mitad, como 45%, se debió a la devaluación", dice, porque México importa la gasolina.

Por eso, "si podemos preservar en la medida de lo posible el tipo de cambio, entonces se eliminará un factor muy importante en el aumento en el precio de las gasolinas", dice.

El principal factor para lograr este propósito, afirma, es la disciplina fiscal. Esto significa, entre otras cosas, mantener el superávit primario y reducir en la medida de lo posible el endeudamiento programado para 2017, que equivale a 2.9% del Producto Interno Bruto, explica Foncerrada.

"En la medida en que los ingresos adicionales se traduzcan en menor deuda y más gasto, es decir, en una disciplina fiscal férrea, se traducirá en mayor bienestar para los mexicanos. De modo que el elemento que tal vez mayor estabilidad le dará a los precios será la disciplina fiscal que debe traducirse en un tipo de cambio estable".

Pero los vientos no soplan a favor del peso. Aun con el acuerdo, el dólar subió ayer a 22 pesos en ventanilla y la semana pasada el Banco de México, a través de la Comisión de Cambios, tuvo que intervenir en el mercado con una subasta extraordinaria.

"Desde febrero de 2016 no veíamos al banco central activo en el mercado cambiario", dice Daniela Blancas, coordinadora del Departamento de Estudios Económicos de Citibanamex.

"Es una señal que después de muchos meses de que no habían activado estos mecanismos de subasta extraordinaria, la Comisión de Cambios interviniera porque inclusive varios jugadores del mercado pensaron que podían intervenir antes", dice.

Ahora lo hace, en un entorno en el que el peso ha tenido un comportamiento particularmente desfavorable, dice. "Había condiciones en los mercados globales relativamente positivas, y aun así veíamos el tipo de cambio consistentemente depreciándose, perdiendo en un entorno que no necesariamente hubiera sido negativo", afirma Blancas, de Citibanamex.

"Vamos a seguir viendo niveles por arriba de los 20 pesos por dólar y, en comparación con el año pasado, se plantea un tipo de cambio completamente diferente", dice.

La especialista advierte que la caída del peso frente al dólar, el aumento en el precio de la gasolina y el incremento en el salario mínimo, entre otros, tendrán efectos sobre la inflación.

No lo prevén solamente en Citibanamex, advierte. "Es consenso del mercado que esto va a tener una filtración en el lado de la inflación y un impacto en el consumo", dice.

"Todo se conjuga un poco para tener costos más altos, cosa que no veíamos hace dos años, cuando teníamos una inflación de cerca de 2% y una estructura de costos totalmente diferente, los precios de los combustibles, en especial del petróleo, de la energía, a la baja, lo que permitía tener menores costos de producción", explica.

Ahora, en cambio, el escenario es diferente, dice. Los precios del petróleo han repuntado moderadamente, y por lo tanto todos los energéticos y las materias primas tienen una tendencia al alza que también se filtra con mayores costos que, al final, pasan a los consumidores.

Para los consumidores, el tema del crédito también se complica, pues hay que recordar que el Banco de México subió las tasas de interés, "de manera más agresiva de lo que esperábamos como consenso del mercado", dice Blancas.

Por lo tanto, el pronóstico de Citibanamex es que las tasas de interés seguirán subiendo, con posibles efectos sobre la inflación y la economía para 2017.

El efecto más contundente en las finanzas del país se verá reflejado en el servicio de la deuda nacional, explica Héctor Villarreal.

"Las tasas de interés ocasionarán que el servicio de deuda pueda tener un incremento importante este año y el siguiente, lo que puede presionar mucho al país", dice.

 VIENEN MESES DIFíCILES

"Es un hecho que vienen meses difíciles", dice Héctor Villarreal, director del Centro de Investigación Económica y Presupuestal. Pero advierte que el país no debe tentar el fatalismo y asegura que hay signos económicos positivos, como una tasa de desempleo "muy baja", y regiones todavía muy dinámicas.

"Lo que vemos en este momento, en enero de 2017, es una economía del país que todavía anda bien, pero un gobierno pobre", dice. "En las finanzas públicas sí hay un problema y las vemos muy frágiles".

Por eso considera que es inviable la exigencia de reducir, por ejemplo, el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) a los precios de las gasolinas, pues obligaría al gobierno a elegir de dónde obtener esos recursos.

Tiene de "tres sopas", explica: o recorta gasto, o busca otra fuente de ingresos, que implicaría crear otro tipo de impuestos, o se endeuda. "Pero si no queremos que haya más impuestos, si no queremos más recortes al presupuesto y si no queremos deuda, no hay otra más que aceptar el IEPS como está".

Villarreal asegura que el CIEP mira una economía "relativamente buena, con una buena inercia", a pesar del aumento en gasolinas que enciende las alarmas de la gente porque le recuerdan las crisis de los 80 y 90.

"Esto es diferente", afirma. "Es probable que veamos más inflación que en años anteriores, porque venimos de niveles bajos, pero no vamos a volver a una inflación de dos dígitos, eso no".

Por eso advierte que hay que tener mucho cuidado de "no generarnos una crisis por expectativa, porque cuando todo el mundo se pone nervioso, lo que termina sucediendo es que se congela la inversión, se congela el consumo, y eso sí podría ser peligroso".

Para el director del CIEP, todo lo que ocurre actualmente en el país es "una ventana de oportunidad" para que la sociedad participe más en las decisiones del gobierno, en el combate a la corrupción y en la exigencia de buenos servicios públicos.

Pero hay que alejar en la medida de lo posible la incertidumbre, "porque puede ser muy canija", dice.

No se vale que como la gasolina subió 20 por ciento, los precios también se incrementen igual”.— LUIS FONCERRADA, director de CEES
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estiman la inflación al cierre de año los analistas.

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del PIB equivale el superávit

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se incrementó el precio de la gasolina en enero.

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