Labor. La misa fue porque hace un año FUNDENL inició la búsqueda en campo de sus familiares desaparecidos. (ESPECIAL)
Familiares de desaparecidos de Nuevo León realizaron ayer sábado un "homenaje a pie de fosa", y misa en honor a los muertos, cuyos restos fueron incinerados y abandonados en un predio del ejido Las Abejas, en el municipio de Salinas Victoria, Nuevo León, donde habrían sido torturadas y asesinadas cientos de personas por una banda del crimen organizado.
Sin embargo, al llegar al terreno después de salir de la carretera a Nuevo Laredo y avanzar unos tres kilómetros, los familiares de víctimas de desaparición se indignaron porque sobre un portón de malla de acero y alambre de púas fue colocada cinta de plástico con la leyenda "prohibido el paso". Además, había dos oficios enmicados con el sello de la Procuraduría General de Justicia del Estado, que tienen la firma de la agente del Ministerio Público, Zaida Azucena Arreola Barrera, especializada en despojo de inmueble, y se advertía que el predio estaba asegurado desde el 28 de enero de 2015.
Irma Leticia Hidalgo, dirigente de Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en Nuevo León (FUNDENL), que organizó el acto, aseguró que este año había ingresado cuatro veces al predio sin ningún problema, la última el pasado miércoles, y no observó ningún oficio de la Procuraduría.