Gunnlaugsson renunció al cargo en una reunión interna de la formación que preside, el Partido Progresista, y en medio de fuertes presiones tanto desde la oposición como de la calle. (ARCHIVO)
Cayó el primer político involucrado en el escándalo Papeles de Panamá ("Panama Papers"). El primer ministro islandés, Sigmundur David Gunnlaugsson, presentó su dimisión dos días después de difundirse las filtraciones que le vinculan a una empresa "offshore", en un paraíso fiscal.
Con 41 años de edad y apenas tres en el gobierno, Gunnlaugsson renunció al cargo en una reunión interna de la formación que preside, el Partido Progresista, y en medio de fuertes presiones tanto desde la oposición como de la calle.
Todavía el lunes, en medio de la tormenta desatada por las filtraciones, el primer ministro expresó su determinación de seguir al frente del gobierno y pidió al presidente del país, Ólafur Ragnar Grímsson, la disolución del Parlamento.
El jefe del Estado había dejado en suspenso esa petición, por considerar que primero debía abordar lo ocurrido con su socio de coalición, el Partido de la Independencia, cuyo líder y ministro de Finanzas, Bjarni Benediktsson, también aparece en los denominados Papeles de Panamá.
Según la investigación encabezada por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ, por su siglas en inglés), Gunnlaugsson y su esposa, Sigurlaug Pálsdóttir, eran dueños de una sociedad en ese paraíso fiscal llamada Wintris. Ahí depositaron casi 4 millones de dólares en bonos en los tres principales bancos islandeses, que se hundieron en la crisis de 2008. Gunnlaugsson entró en el Parlamento islandés en 2009 y a finales de ese año vendió su 50 % de participación en Wintris a su esposa por un dólar.