Incómoda, observada, acosada, sucia y hasta "puta" fue como llegó a sentirse Casandra al dar pecho a su pequeña en público mientras recorría diversos sectores de la ciudad.
En agosto, el mes de la Lactancia Materna, establecido por el Gobierno de Coahuila, El Siglo de Torreón realizó un experimento social para conocer la reacción de los ciudadanos ante una madre alimentando, a su bebé en público.
La primera visita fue en el "corazón" de la Alianza, al poniente de Torreón.
Casandra, de 21 años de edad, caminó con normalidad por las estrechas banquetas de este sector comercial. Las miradas no se hicieron esperar sobre todo por parte de los hombres tanto comerciantes como clientes. Y es que de forma natural, la joven mamá sacó su pecho y comenzó a darle de comer a su pequeña de un año y un mes de edad.
Las mujeres eran las más sorprendidas, algunas sólo murmuraban entre ellas al verla pasar.
Una comerciante, que en cuyo local luce una gran imagen de la Virgen de Guadalupe pegada en la pared, no dudo en decir en voz alta "mira ésta toda felizota con la chichi de fuera"; Casandra siguió su camino.
Otro punto fue la Presidencia Municipal de Torreón.
Casandra entró al inmueble con su pequeña hija de la mano.
De pronto, tomó nuevamente a su niña entre sus brazos, para darle pecho pues habían caminado un par de cuadras y el calor cobraba la factura.
Las miradas del guardia de la puerta principal, no se hicieron esperar. Eran de asombro.
Tranquila, la joven madre se acercó para hacerle unas preguntas sobre unos pagos, las que el guardia contestó con nerviosismo, intentando no bajar su mirada al pecho desnudo de Casandra.
Tomó asiento en la sala de espera del inmueble. No estaba sola, hombres y mujeres de la tercera edad, la rodeaban.
Fue precisamente en este punto, en donde la madre de la pequeña, sintió las miradas más duras.
"Me sentí un poco más incómoda aquí (Presidencia Municipal) sobre todo por parte de la mujeres, que ni siquiera voltean a verte a los ojos", dijo molesta.
De los señores, comentó que sintió su mirada con "morbo... de siempre, al estarte viendo el pecho, y no sé, se apretaban de labios", comentó al terminar los recorridos.
IMPRESIONES
Para Casandra, esas miradas y los malos comentarios que se escucharon en su caminar, es el resultado de la falta de consciencia y sobre todo de madurez.
"Como sociedad no estamos preparados para ver a una mujer lactar, estamos más bien preparados para ver a mujeres con escotes pronunciados para verles el pecho, no estamos acostumbrados para ver para lo que es el pecho, que es la alimentación", dijo.
Por su parte, Silka Guerrero, presidenta de la asociación Nacer Libre, que promueve la Lactancia Materna así como los partos humanizados, comentó que todo lo que padeció Casandra en su recorrido, es "porque se ha dejado de normalizar lo natural entonces les parece raro, si hubiera pasado ella con un biberón en la mano a nadie le hubiera escandalizado, pero como está pasando alimentando del seno materno, eso sí les causa conmoción".
Además, comentó que en los últimos años, se han sexualizado los senos de la mujer. "Ese es el problema, porque ahora sólo creen que es para eso, para dar placer, y no, la principal función es para dar alimento, entonces si seguimos viendo en la tele, en las revistas, mujeres enseñando los pechos al máximo sólo con dos estrellitas en los pezones, eso acostumbramos al colectivo consciente 'lo normal es para el placer, entonces si yo me saco el pecho la gente dirá 'mira ésta exhibicionista', 'le encanta sacarlas'", reacciones que provocó Casandra en su paseo por el sector Alianza y la Presidencia Municipal.
PROPUESTA
Ante tal situación, Guerrero propone: Más que desplegados por parte de los gobiernos promoviendo la lactancia materna, propone que el tema de la lactancia se toque desde los estudiantes de nivel Primaria, para que lo vean como algo natural y no llegan a la edad adulta y lo vean como un tema tabú; también, pide espacios para aquellas mujeres que quieran hacerlo con mayor privacidad, como los lactarios.
Y algo que reconoce sería algo imposible "es que el permiso de maternidad se extienda, porque son tres meses ridículos, no podemos esperar que una mujer establezca su lactancia de manera satisfactoria si nada más tiene pocas semanas para tener ese vínculo, es ridículo, en primer lugar", recalcó Guerrero, quien también se unió al experimento social, brindando la entrevista mientras daba pecho.
OPINIÓN
Casandra lanza el siguiente mensaje a todas las mamás:
"Que se empoderen, que se llenen de información, que se acerquen a los grupos de apoyo de La Laguna para que se llenen de más información.
Sé que es muy difícil dar pecho, sobre todo por los malos comentarios, es pesado, pero al final de cuentas lo estás haciendo por tus hijos y no y no por la demás gente".
Consejo
La Organización Mundial de la Salud recomienda la lactancia materna exclusiva durante seis meses, la introducción de alimentos apropiados para la edad y seguros a partir de entonces, y el mantenimiento de la lactancia materna hasta los 2 años o más.
Señala que la lactancia materna es la forma ideal de aportar a los niños pequeños los nutrientes que necesitan para un crecimiento y desarrollo saludables. Prácticamente todas las mujeres pueden amamantar, siempre que dispongan de buena información y del apoyo de su familia y del sistema de atención de salud.
Morbo. La joven de 21 años de edad, caminó con normalidad por las estrechas banquetas de La Alianza mientras alimentaba a su pequeña hija, bajo la miradas de los ciudadanos. (GUADALUPE MIRANDA)