
Los botes permiten organizar la basura de un modo higiénico que previene enfermedades. (ARCHIVO)
Diariamente es utilizado y sin el, probablemente los lugares en que los seres humanos se desarrollan estarían llenos de desechos que terminarían afectándoles en su salud.
Se trata del bote de basura, una pequeña idea que buscó dar orden a las ciudades y que terminó convirtiéndose en una de las mejores formas de mantener lejos las enfermedades.
Según el portal desechos-solidos.com, inicialmente las personas tenían la costumbre de vertir sus desechos en las calles o en los ríos, pero esto representaba problemas a la salud.
Fue hasta el siglo XIX, señala la fuente citada, cuando las autoridades caen en la cuenta de que "la higiene es importante para prevenir las enfermedades y en 1883, el Prefecto de París, Eugene Poubelle, obliga a los parisinos a arrojar sus residuos en un contenedor, que fue rebautizado con el nombre de 'basurero'".
Asimismo, detalla el sitio actuallynotes.com, el prefecto dictó "un bando mediante el cual se decretaba que los propietarios de los inmuebles debían poner a disposición de los arrendados recipientes comunes donde depositar los desperdicios domésticos".
Con el tiempo llegó la hora de los creativos y diseñadores, quienes hicieron sus respectivas aportaciones para que se llegara a los incluso modernos contenedores de basura que se utilizan actualmente.