Cuando un lunar es cáncer
Cualquier ser humano tiene lunares, muchos de ellos de nacimiento. Los que en ocasiones pueden llegar a causar preocupación son aquellos que salen de la noche a la mañana, ya que pueden volverse melanoma -cáncer en la piel-, el pasado cuatro de febrero se celebró el Día mundial contra tal enfermedad.
Con motivo del Día Mundial contra el Cáncer, que se celebra cada 4 de febrero, Doctor en Casa entrevistó al doctor Felipe Valero Martínez, quien explicó que los lunares son comunes en la cara y los brazos.
“Son lisos, sin crecimiento ostensible, pálidos sin lesiones, sin lunares cercanos, no provocan dolor. Un lunar común tiene menos de cinco milímetros de ancho (cerca de un cuarto de pulgada). Es redondo u ovalado y, frecuentemente, presenta forma de cúpula”, explicó.
El médico expresó que pueden convertirse en melanoma si son agredidos, como rasurarlos diariamente. “Aunque los lunares comunes no son cancerosos, las personas que presentan más de 50 lunares comunes tienen un mayor riesgo de padecer melanoma”, agregó el especialista.
¿Cuáles son los nevo displásico?
Aquellos lunares que tienen crecimiento desordenado y rápido se les denomina ‘nevo displásico’, son
de diferente apariencia al de los habituales. Un nevo displásico puede ser más grande que un lunar común, y su color, superficie y bordes suelen ser diferentes.
“A veces muestran una mezcla de varios colores, desde rosado hasta castaño oscuro. Usualmente son planos con una superficie lisa, escamosa o arenosa; también pueden volverse melanoma, por lo que hay que extirparlos y enviarlos a estudio patológico”, explica Valero Martínez.
Al cuestionarle al doctor si hay que quitar cualquier lunar que aparezca, respondió que sólo aquellos que presenten cambios de color, tamaño, crecimiento y satelitosis.
“Especialmente si presentan prurito dolor y secreción purulenta con formación de costra. Factores como senilidad, tabaquismo y radiaciones solares así como antecedentes familiares y una mala alimentación elevan la posibilidad de presentar melanoma”, puntualizó Valero Martínez.
TIPOS DE CÁNCER DE PIEL
Existen varios tipos de cáncer de piel no melanoma, sin embargo, dos son los más comunes: el carcinoma basocelular y el carcinoma de células escamosas.
El carcinoma basocelular: Es un tumor de crecimiento lento. Es muy raro que un cáncer de células basales se extienda a partes distantes del cuerpo. No obstante, si un cáncer de células basales se deja sin tratar, puede extenderse a las áreas cercanas y afectar los huesos, así como otros tejidos de la piel. Después del tratamiento, el carcinoma basocelular puede reaparecer en el mismo lugar de la piel.
El carcinoma espinocelular: Se desarrolla en las capas superiores de la epidermis y representa alrededor del 20 por ciento de todos los casos de cáncer de la piel. Con frecuencia aparece en áreas del cuerpo expuestas al sol, tales como la cara, las orejas, el cuello, los labios y el dorso de las manos. También se puede desarrollar en cicatrices o úlceras de la piel en otras partes del cuerpo.
Para saber
La regla "ABCDE” describe las características del melanoma
Asimetría. La forma de una mitad no es igual a la de la otra mitad.
Borde irregular. Los bordes son, con frecuencia, desiguales, con muescas o borrosos en su contorno.
Color disparejo. Tonos de negro, castaño y tostado pueden estar presentes. Pueden verse también zonas blancas, grises, rojas, rosadas o azules.
Diámetro. Hay cambio en el tamaño, en general un aumento. Los melanomas pueden ser pequeños, pero la mayoría tienen más de 6 milímetros de ancho.
Evolución. El lunar ha cambiado en las últimas semanas o meses.
