Sin t咜ulo, de la serie Los nuevos anti imperialistas.
Por las calles de La Habana, como si fuera un ola caribeña emergiendo de lo hondo, se pueden ver las tribus urbanas de Cuba esparciéndose de lado a lado por la ciudad, reclutándose cual ejército por las noches en el barrio del Vedado, con tenis Nike, cabello sin forma y un tatuaje en alguna parte del cuerpo como signo de rebeldía.
Las tribus urbanas son un pedazo de la juventud cubana en el que se ve reflejado un cambio generacional tan drástico que contrasta con la idea arquetípica del ciudadano común de la isla.
El viejo ‘son cubano’ ya no mueve sus pies ni eriza sus manos, ahora los beats de una música importada y extranjera que se coló a la isla ha llegado a sus oídos para quedarse.
Más cercanos a Don Omar que a Engels y Lenin; a los nuevos jóvenes cubanos se les pueden ver rasgos de una occidentalización tan influyente en ellos como la del Che en los viejos, donde los últimos reflejos de insurgencia se encuentran en sus cabellos, en el tatuaje, el arete, en la música punk y electrónica.
Son la nueva generación de Cuba, los nuevos guiadores de la ‘patria o muerte’, los nuevos bolcheviques, los nuevos antiimperialistas que han cambiado la lucha clandestina en la Sierra Leona por la lucha abierta en los rincones de las calles G y 23 de La Habana.