Cerrados.- Las cantinas y hoteles cerrados antier lunes en la tarde en el sector Alianza, seguirán cerrados indefinidamente.
Los establecimientos dedicados a la venta de bebidas embriagantes que fueron clausurados antier lunes, en varios de los cuales se ejercía la prostitución y operaban como hoteles, no serán reabiertos.
El alcalde Miguel Riquelme dijo que "lo más probable es que no sean reabiertos, pues además las condiciones sanitarias son deplorables".
Reconoció que: "Sabemos que se pueden generar protestas o problemas de desempleo, pero mejor prefiero arreglarme con los propietarios financieramente para que no los reabran".
Aseguró que los operativos contra este tipo de negocios seguirán. "Porque aún nos faltan revisiones en muchos lugares de este tipo...".
Antier lunes después del mediodía, elementos de diversas corporaciones, así como dependencias municipales como Protección Civil, Inspección y Verificación, clausuraron alrededor de 30 negocios en el sector Alianza.
Algunos funcionaban como cantinas, pero hacían las funciones de hoteles en la parte trasera de las instalaciones.
Fue principalmente en la tradicional privada Viesca donde se cerraron estos negocios en su mayoría por factores administrativos, según los encargados, que todavía ese día en la noche aseguraron que abrirían al día siguiente.
No obstante, para el alcalde Miguel Riquelme, dadas las condiciones en que operaban esos negocios, "son semilleros para el crimen organizado, de ahí que lo mejor es mantenerlos cerrados".
El presidente municipal expresa que "tenemos que ofrecerles alternativas para que trabajen las personas que laboran ahí, pero vamos a hacer acciones integrales de manera que sigan cerrados".
Riquelme destacó la necesidad de darles a esos lugares un mejor uso, considerando el valor histórico.
Exigen respeto a sus derechos
Un grupo de aproximadamente cien sexoservidoras y trabajadoras de los bares clausurados el pasado lunes, se manifestaron ayer al medio día para exigir se les respeten sus derechos y les devuelvan su fuente de trabajo.
La manifestación inició minutos después de las 13:00 horas y en la misma participaron las personas que laboran o prestan sus servicios en las 30 cantinas y tres moteles que fueron clausurados la tarde del pasado lunes en el sector poniente de Torreón.
Las quejosas que portaban cartulinas y gritaban consignas contra las autoridades municipales se reunieron en la calle Múzquiz y bulevar Constitución a la entrada de la ciudad de Torreón, donde permanecieron por espacio de una hora.
La mayoría de las mujeres portaba cartulinas con mensajes alusivos al cierre de los negocios y que consideran fue una injusticia porque son sus fuentes de trabajo.
Una hora después arribó el titular de la DSPM, quien dialogó con algunas de las manifestantes en el cruce de la calle Múzquiz y el bulevar Independencia, quien prometió hablar con el alcalde de su situación.
Algunas de las afectadas, señalaron que por lo menos 200 personas dependen de los negocios que fueron cerrados y acordaron formar una comisión para reunirse con el alcalde Miguel Ángel Riquelme Solís.
Aseguraron que cuentan con los permisos correspondientes para ejercer su labor y que de la misma dependen sus familias por lo que no están dispuestas a perder dicho ingreso, ante la falta de trabajo en La Laguna.
Las trabajadoras señalaron que continuarán con su movilización hasta que el alcalde entienda que ellas son sólo trabajadoras y no criminales.
