Vista. Jessica Biel, Kate Beckinsale, el director Len Wiseman y Colin Farrell promocionaron ayer la película en las playas de Cancún.
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Colin Farrell, protagonista de Total Recall, entiende que hacer un remake genera dudas, pero esta nueva versión de la película de 1990 que estelarizó Arnold Schwarzenegger lo atrapó por la forma en que es abordada.
"La palabra 'remake' está estigmatizada y entiendo eso por ser un fanático del cine antes de trabajar en esto, antes de ser actor, y manteniendo muchas de las ideas y pensamientos que tenía como fan", reconoce Farrell en conferencia de prensa.
"Pero luego leí el guión en las siguientes 24 horas de que había escuchado que harían la película y realmente me gustó, fue una lectura fantástica, sabía que iba a ser algo enorme, sabía que iba a ser espectacular".
Cuando se reunió con el director Len Wiseman por primera vez, el actor irlandés tuvo la oportunidad de ver el mundo que éste había previsualizado, confirmando sus sospechas de la magnitud del proyecto.
"Fue muy cercano a un 'no brainer' la decisión de involucrarte en una película de 150 millones o lo que sea que haya costado", cuenta.
"Es aterrador, no había estado en una película grande en cuanto presupuesto en mucho tiempo. Fue irresistible. Me atrajo, hablamos de ese deseo como de niño de jugar y hacer creer, y me atrapó al ver el arte la primera vez que nos conocimos, vi estos mundos increíbles que había creado y yo simplemente pensé que podría estar en ese cuadro, sería 'cool' habitar ese mundo aún cuando estaría en una caja en Toronto frente a una pantalla verde". Kate Beckinsale y Jessica Biel también participan en la cinta, que llega a México en agosto.
