
Las evidencias más claras de pérdida de hormona del crecimiento en personas adultas incluyen disminución de masa muscular y densidad ósea, igualmente hay fatiga y un pobre rendimiento físico e intelectual. INGIMAGE
Tener más de 40 años es un factor de riesgo para el desarrollo de una condición llamada somatopausia, es decir, disminución en la producción de hormona del crecimiento, informó el experto del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Jalisco, Miguel Escalante Pulido.
Sin embargo, señaló, el hecho de sufrir lesiones o cirugías a nivel cerebral, puede causar este efecto al margen de la edad.
El galeno, quien es titular del servicio de Endocrinología en el Hospital de Especialidades del IMSS en el estado, destacó que existe una controversia mundial que radica en si todas las personas con pérdida en la secreción de esta hormona se les debe dar terapia de reemplazo.
Comentó que al ser un anabólico, la hormona del crecimiento aplicada sin un adecuado seguimiento médico puede producir efectos no deseados, entre ellos la aparición de tumores, elevación de glucosa y lípidos con riesgo de presentar el llamado síndrome metabólico, precursor importante de la diabetes.
“Las evidencias más claras de pérdida de hormona del crecimiento en personas adultas incluyen disminución de masa muscular y densidad ósea, igualmente hay fatiga y un pobre rendimiento físico e intelectual”, señaló Escalante Pulido.
Añadió que la somatopausia también se asocia con alteraciones neurológicas entre las que citó la disminución en la capacidad de atención, de memoria y además los pacientes refieren tener dolores generalizados como ocurre en la fibromialgia.
“La baja secreción de hormona del crecimiento tiene un efecto adverso en prácticamente todo el organismo”, apuntó.
Destacó que se ha comprobado que la práctica frecuente de ejercicio físico, concretamente de tipo aeróbico, junto a una dieta con adecuado contenido proteico, promueven la secreción de esta importante hormona, de manera que la somatopausia se retarda y con ello sus efectos adversos y eventualmente discapacitantes.
Por otro lado, en lo que respecta a la pérdida de hormona del crecimiento por traumatismo cráneoencefálico o por cirugía de hipófisis, el médico reiteró que ésta ocurre al margen de la edad, pero además es de forma rápida y absoluta.
Indicó que en estos casos sí procede una terapia de reemplazo hormonal por tiempo prolongado “de un año aproximadamente, aunque hay criterios que establecen entre cinco y 10 años de tratamiento”, dijo.
Reiteró que la práctica de ejercicio, dieta con contenido de proteínas y asesoramiento médico, son fundamentales en el tema de la hormona del crecimiento, sobre todo porque existe la creencia generalizada de que es la 'fuente de la juventud'.